En un comunicado, el directivo indicó que en la actualidad la alianza se encuentra entre los tres grupos automotrices más importantes a nivel global, y tiene el objetivo de mantener su ventaja competitiva en el mercado.
Ghosn ha señalado que la alianza desarrolla un plan de sinergias con Mitsubishi con pleno respeto a las diferencias entre las identidades que la conforman, y también porque Mitsubishi podrá aprovechar las plataformas comunes y tecnologías desarrolladas por la alianza.
Cabe recordar que, en cuanto al horizonte de la industria automotriz en Europa, la alianza ha tenido un crecimiento por encima de lo esperado a inicios de este año, así que la expectativa es que el mercado europeo continúe su recuperación.
Con más de nueve millones 960 mil vehículos vendidos en 2016 a nivel global, la alianza está muy cerca de colocarse a la cabeza de la industria automotriz, y llegar a la cima no representa una diferencia en términos de volumen pero sí una gran fuente de motivación para sus colaboradores.
Fundada en 1999, la alianza Renault-Nissan, ahora junto a su nuevo socio Mitsubishi Motors, es la combinación intercultural más duradera que existe hoy en día entre las grandes compañías fabricantes de automóviles.
Esa asociación única es una herramienta de negocios flexible que se puede ampliar para acomodar nuevos proyectos y socios alrededor del mundo.
La alianza protege a sus socios durante las épocas de disminución de actividad económica en las regiones, y también ha acelerado el impulso de Renault y Nissan en algunas de las economías de crecimiento más rápido del mundo.
También ha ayudado a Renault y a Nissan a superar a históricos rivales regionales, elevando a ambas compañías a un nivel de élite.
Cuando Nissan Motor Corporation adquirió un 34 por ciento de participación en el capital de Mitsubishi Motors el 20 de octubre de 2016 la alianza se colocó entre los cuatro grupos automotrices más importantes del mundo en ese año.
La plataforma de negocios de la alianza maximiza las sinergias sin dañar la identidad de marca, debido a que está basada en una participación cruzada e interés mutuo.
Con el fin de alcanzar economías a escala competitivas, muchos fabricantes de vehículos están buscando colaboraciones parecidas a la revolucionaria alianza establecida entre Renault y Nissan hace 18 años, que mantuvo un crecimiento sostenible en 2016 por medio de la colaboración entre marcas y maximizando sus sinergias.
Al respecto, Ghosn manifestó que “uno de los retos más grandes en este sentido es mantener diferentes identidades para las marcas, al tiempo que se construyen puntos en común. Éstos crean sinergias que representan buenos resultados financieros”.
Por eso, el directivo garantizó que la cooperación entre las tres compañías siga adelante sin que cada una pierda su identidad.