Comparece ante juez chofer de camión en el que murieron indocumentados

James Mathew Bradley, el conductor del tráiler donde murieron asfixiados una decena de inmigrantes indocumentados, y otros 30 más fueron afectados por golpe de calor, compareció hoy ante un juez federal en San Antonio, Texas.

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En una breve audiencia en la Corte Federal en San Antonio, Bradley, de 60 años de edad, fue notificado de que será formalmente acusado el próximo 27 de julio de contrabando de extranjeros con resultado de muerte, lo que podría conducirlo a una sentencia de cadena perpetua e incluso de pena de muerte.

Bradley permanecerá detenido, sin derecho a fianza, hasta cuando menos el próximo jueves cuando se efectúe su próxima comparecencia.

En su declaración inicial ante la policía, el chofer de origen afroamericano aseguró que no sabía que había gente en el interior de la caja del tráiler, de acuerdo con el testimonio de un agente federal presentado este lunes ante la Corte Federal.

Bradley dijo a las autoridades que se dio cuenta de la presencia de los inmigrantes al estacionar el camión y bajarse a orinar, porque escuchó gritos y golpes en el interior del remolque.

Afirmó que luego al darse cuenta, abrió las puertas del remolque y trató de ayudarles.

"Bradley declaró que cuando llegó al Walmart salió del vehículo para orinar y escuchó golpear y sacudir dentro del remolque", escribió un agente de la división de Investigaciones de Seguridad Interna (HSI) de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), en el testimonio presentado en la Corte.

“Bradley dijo que fue a abrir las puertas y se sorprendió cuando fue atropellado por la gente que hablaba en español y que varios de ellos cayeron al suelo”.

De acuerdo con el testimonio del agente federal, el conductor del camión dijo que sabía que el sistema de refrigeración del camión no funcionaba y que los conductos de ventilación estaban obstruidos.

Los documentos interpuestos en la Corte contienen también la declaración de uno de los inmigrantes que fue cuestionado por los agentes federales el domingo, poco después de ser encontrado el tráiler en el estacionamiento de una tienda Walmart al suroeste de San Antonio.

El inmigrante dijo a los agentes federales que al menos unas 70 personas fueron colocadas dentro de la caja del camión.

Informó que los inmigrantes fueron subidos al camión la mañana del sábado en la comunidad fronteriza de Laredo, pero no fue sino hasta alrededor de las 21 horas que comenzaron el viaje hacia San Antonio.

"Los contrabandistas aseguraron que habría refrigeración dentro de la caja”, dijo el inmigrante que no fue identificado en el documento. “Pero cuando cerraron las puertas y se oscureció todo, ya estaba caliente adentro”.

Según el agente del HSI, el inmigrante declaró que no les dieron agua ni alimento durante las horas que permanecieron estacionados en Laredo ni en el viaje a San Antonio.

“La gente hacia ruido en el interior de la caja para tratar de llamar la atención de alguien, pero nadie los atendió”, indicó.

El inmigrante declaró a los agentes que fue durante el viaje a Laredo que la gente dentro del remolque comenzó a tener problemas para respirar y algunos comenzaron a desmayarse.

“La gente comenzó a golpear las paredes de la caja y hacer ruido para llamar la atención del chofer. El conductor nunca se detuvo. La gente hizo un agujero en la pared de la caja para proporcionar un poco de ventilación y comenzaron a tomar turnos para respirar en el agujero", detalló.

Contradiciendo lo declarado por el chofer, el inmigrante dijo que las puertas del camión fueron abiertas en el estacionamiento del Walmart y cuando menos seis automóviles llegaron a recoger a algunos inmigrantes.

El incidente descubierto la madrugada de este domingo, se asemeja al registrado en mayo de 2003 cuando 19 inmigrantes indocumentados fallecieron asfixiados por el calor en la caja de un tráiler que fue dejado abandonado cerca de la comunidad de Victoria, Texas.

Los inmigrantes formaban parte de unos 100 que habían sido encerrados en la caja del tráiler para ser transportados entre McAllen y Houston. Los indocumentados murieron por el calor y la falta de aire dentro de la caja sellada.

Fuente: Notimex