En Conferencia de Prensa en conjunto con la AMIA y la INA, el director general adjunto de la AMDA afirmó que de la totalidad de automotores nuevos comercializados en el periodo de referencia, 62.4 por ciento fueron colocados mediante un financiamiento.
Por tipo de crédito, las Financieras de Marca (vinculadas a los armadoras) quedaron con una participación de mercado de 74.3 por ciento con 347,184 vehículos, seguido de Bancos con 22.6 por ciento y 105,841; mientras que Autofinanciamiento mantuvo el 3.1 por ciento y 14,377 unidades.
En cuanto a la internación de vehículos usados de Estados Unidos y Canadá a México, el directivo de la AMDA informó que entre enero y octubre de este año se han importado formalmente 97,516, 30,154 menos, equivalente a una contracción de 23.6 por ciento.
“Este índice representó el 13 por ciento del total de automotores nuevos vendidos en el mismo periodo”, ajustó.
Sobre la venta de unidades ligeras nuevas en noviembre de 2020, Rosales Zárate corroboró que se colocaron 95,485, significando una baja de 23.5 por ciento en comparación al mismo mes del año pasado cuando se comercializaron 124,792, 29,307 menos. Y en las cifras acumuladas de enero a noviembre se han comercializado 843,986 vehículos ligeros, lo que representa una caída del 28.91 por ciento respecto al año pasado.
“Con ello se confirma la tendencia del mercado interno de vehículos ligeros de una recuperación sostenida pero lenta a partir del shock causado por el cierre de actividades en abril y mayo para combatir el Covid-19, inicio de la fase estacional de fin de año y persistencia de riesgos en el escenario de corto plazo por incremento de contagios”, dijo Rosales Zárate.
La perspectiva de corto plazo apunta a un escenario similar a los últimos meses, ubicando el riesgo principal en un incremento acelerado de contagios que lleven a las autoridades a restringir actividades económicas y movilidad.“Si bien es cierto que las ventas de noviembre incrementaron 13.26 por ciento en comparación con octubre, lo cual es un dato positivo, hay que ubicar la perspectiva de marcada estacionalidad del mercado automotor.
En este sentido el Buen Fin enmarcó el inicio de la temporada de mayores ventas en el año (noviembre y diciembre) que representan casi el 20 por ciento del total anual.
Por último, el directivo de la AMDA agregó que las promociones de los fabricantes y sus redes de distribuidores contribuyeron a mejorar la disposición de compra, concatenado con un mejor ánimo de una parte del grupo de consumidores con capacidad de compra que venían posponiendo la adquisición de un vehículo y que se mostraron dispuestos a optimizar su inversión con la oferta comercial disponible.