Vehículos autónomos potencial para crecer en la nueva normalidad

Durante el último año, diversos países han realizado grandes progresos en su preparación para los vehículos autónomos (AV, por sus siglas en inglés), debido a que las autoridades se han enfocado en los elementos regulatorios y de aceptación social que hacen posible esta tecnología.

La pandemia de COVID-19 y los constantes cambios en las necesidades de los usuarios, así como en los requerimientos medioambientales podrían acelerar el desarrollo y utilización de vehículos autónomos en el mundo, de acuerdo con los hallazgos del Índice de Preparación de Vehículos Autónomos 2020 (AVRI, por sus siglas en inglés), elaborado por KPMG International, red global de firmas multidisciplinarias que brindan servicios de Auditoría, Impuestos y Asesoría.


En su tercera edición, el reporte de KPMG evalúa el avance de 30 países y jurisdicciones en la adopción y progreso de los AV, y muestra que la mayoría han aumentado su preparación en el último año. México ocupa el lugar 28 de 30 naciones evaluadas antes de India y Brasil, mientras que Singapur se ubica en el lugar primer lugar, desplazando a los Países Bajos.

La medición se realiza por medio de 28 indicadores que evalúan la preparación y avance en la promoción de uso e innovación de los AV. Tales indicadores están organizados en cuatro pilares: política y legislación, tecnología e innovación, infraestructura, y aceptación del consumidor. Por primera vez, la edición 2020 también analiza las iniciativas de AV a nivel municipal, revisando los desarrollos en cinco ciudades notables: Pekín, Detroit, Helsinki, Pittsburgh y Seúl.

“Apenas hemos comenzado a vislumbrar el potencial transformador que tiene esta tecnología. La mayoría de los países, jurisdicciones y localidades analizados en el índice de KPMG han aumentado su preparación e iniciativas para promover el desarrollo y uso de vehículos autónomos; podemos observar que 17 de los 25 países incluidos en el estudio de 2019 aumentaron sus puntajes en 2020”, señala Ignacio García de Presno, Socio Líder de Infraestructura de KPMG en México.
“Se ha hecho un gran progreso global para lograr que los vehículos autónomos funcionen de manera más segura y efectiva. Si vemos a futuro, los vehículos sin conductor podrían tener un mayor papel al satisfacer las nuevas necesidades de movilidad, tanto de personas como de mercancías, derivadas de la pandemia de COVID-19. Ampliar el uso e integrar los AV en la vida cotidiana depende en gran medida de lo que hagan los países y ciudades para impulsar su desarrollo y utilización”, agrega García de Presno.

La interrelación entre la contingencia sanitaria y el desarrollo de vehículos autónomos es compleja: por un lado, el confinamiento a nivel global ha provocado la suspensión de varias pruebas; por otro, la crisis trae consigo una oportunidad relevante para explotar el potencial de los AV e impulsar su adopción a nivel mundial.

La pandemia ha provocado que el transporte público con una elevada concentración de personas deje de ser atractivo para los usuarios, pero opciones como minibuses públicos de conducción autónoma que reciban una limpieza regular se presentan ahora como opciones más viables en comparación con la primera opción o, incluso, en contraste con servicios de transporte privado bajo demanda.

En otras industrias, la contingencia ha incrementado tanto la demanda como la oportunidad para la automatización; el hecho de que los vehículos no tengan conductor es una de las principales razones para su uso. Por ejemplo, en Estados Unidos ya se utilizan este tipo de vehículos para trasladar pruebas de COVID-19 desde el punto de recolección hasta el laboratorio sin que exista supervisión humana y en rutas aisladas.

México, con potencial para el desarrollo

En el ranking de 2019, México se situó en el lugar 23 de 25 naciones evaluadas. Su posición en 2020 se ubica en el lugar 28 de 30.

En los pilares, México tiene la puntuación más baja en relación con las alianzas de la industria. También tiene la segunda puntuación más baja en políticas y regulaciones.

“México cuenta con potencial para el desarrollo de las condiciones que impulsen la utilización de vehículos autónomos dada su proximidad con Estado Unidos. Tarde o temprano nos emparejaremos con ese país, ya que compartimos frontera y somos uno de sus principales aliados comerciales; sin embargo, para lograr un avance, el primer paso debe darlo el gobierno, el cual debe establecer las condiciones para que tanto el sector privado como las universidades puedan trabajar en él”, señala García de Presno.

Principales resultados a nivel mundial

• El índice de este año incluye cinco nuevos países y jurisdicciones: Bélgica (lugar 21), Chile (lugar 27), Dinamarca (lugar 10), Italia (lugar 24) y Taiwán (lugar 13)

• La mayoría de los países han aumentado su preparación para los AV, ya que 17 de los 25 países incluidos en el estudio de 2019 aumentaron sus puntajes en 2020. Específicamente, se están incrementando el número de pilotos de AV, así como las áreas de prueba. Aproximadamente dos terceras partes de los 30 países y jurisdicciones incluidos en el reporte tienen áreas designadas o aprobadas para pruebas de AV

• Singapur superó a Países Bajos, nación que ocupó el primer lugar en las dos ediciones anteriores, lo que refleja su esfuerzo, incluyendo la publicación de normas nacionales para AV y la apertura de una décima parte de todas las vías públicas en Singapur para pruebas de AV

• Tanto Singapur como Países Bajos son líderes en la promoción de vehículos eléctricos (VE), un precursor clave de los AV. Singapur tiene planeado un incremento a gran escala en cuanto a la cantidad de estaciones de carga de VE, mientras que Países Bajos tiene la mayor cantidad de estaciones de carga VE per cápita

• Corea del Sur (séptimo lugar) experimentó el mayor aumento de un año a otro de cualquier país en el índice, subiendo seis lugares entre 2019 y 2020