Ciudades Inteligentes: Tecnología urbana en beneficio de las comunidades

Hay avances tecnológicos que transforman al mundo. El Internet de las Cosas (IoT, por sus siglas en inglés) y las Ciudades Inteligentes son ejemplos de esto. El IoT conecta máquinas, objetos o “cosas”, con el fin de facilitar y mejorar la vida de las personas, permitiendo la interacción digital entre los dispositivos y los humanos. Al capitalizar estas soluciones en las zonas urbanas, surgen las Ciudades Inteligentes.

Las Ciudades Inteligentes utilizan la tecnología para incrementar la calidad de vida de las personas a nivel social, económico e incluso ambiental. El uso de sensores, conectividad móvil y análisis de datos, permite crear ciudades más eficientes, que cumplan mejor con las necesidades de la comunidad.

Basándose en soluciones de IoT, las Ciudades Inteligentes transformarán la infraestructura y los espacios públicos, dando a las comunidades herramientas para optimizar servicios y lograr ahorros y beneficios para los ciudadanos. Por ejemplo, las conexiones entre dispositivos personales (como teléfonos inteligentes y sensores), y activos de la ciudad (como sistemas eléctricos y semáforos), pueden facilitar la vida en las zonas urbanas.

Estas tecnologías proporcionan soluciones a problemas complejos. A futuro, serán vitales para el desarrollo de ciudades sustentables, al ayudar a administrar recursos y reducir la huella ambiental. Además, promueven la inclusión y la equidad, facilitando la vida de la población vulnerable, como los adultos mayores y las personas con capacidades diferentes. A medida que la comunidad mundial busca alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible (SDG, por sus siglas en inglés), las tecnologías de las Ciudades Inteligentes serán cada vez más necesarias.

¿Por dónde empezar? Sin duda, lo primero es contar con la infraestructura adecuada para estas tecnologías, una Ciudad Inteligente es ante todo una ciudad conectada. La fibra óptica, por ejemplo, es indispensable para esto, y aunque aún hay trabajo por hacer, en México la sustitución de redes de cobre por fibra óptica se está dando de forma gradual. Más aún, AT&T anunció el despliegue de la red 4G LTE-M en México y Estados Unidos para finales de 2017, que será el catalizador para el despliegue de IoT a gran escala.

Somos líderes en IoT y nuestra red le da servicio a una gran variedad de industrias, incluyendo transporte, salud y manufactura. Además, impulsamos proyectos de Ciudades Inteligentes, como es el caso de Chicago, Atlanta y Dallas, que se han beneficiado con nuestras tecnologías. Estamos comprometidos con la innovación y gracias a ello, al segundo cuarto de 2017, contamos con cerca de 34 millones de dispositivos conectados a nuestra red a nivel global. Además, sentamos las bases para que los desarrolladores y las empresas puedan innovar y acelerar sus negocios a través del IoT, dando paso al avance tecnológico y a ciudades más conectadas.

El IoT en zonas urbanas es más que un medio para capitalizar la infraestructura existente, es una opción sin precedentes para mejorar la vida de las personas. Estamos frente a la oportunidad de tener ciudades más eficientes, lo que traerá beneficios económicos, calidad de vida, educación y mucho más. En las Ciudades Inteligentes, las posibilidades son infinitas.