La geografía del ciberdelito: América Latina

Kaspersky Lab, líder en el desarrollo de soluciones para el manejo seguro de contenidos y la gestión de amenazas, informó hoy su análisis sobre la naturaleza del delito cibernético en América Latina, el cual examina los primeros nueve meses del 2012, reveló que el 35 por ciento de las computadoras de usuarios en la región fueron atacadas por lo menos una vez mientras navegaban por la web.

Los peores países afectados son Chile, Colombia y Panamá ya que están en el grupo de alto riesgo (casi un 40 por ciento de maquinas atacadas mientras están en línea). Todos los demás países incluidos en el estudio caen en el grupo de riesgo medio (30-36 por ciento).

Según Dmitry Bestuzhev, Director del grupo de Análisis e Investigación de Kaspersky Lab para América Latina, el cibercrimen tiene características geográficas específicas.

El uso del Internet en Latinoamérica crece cada día más. Millones de personas en la región guardan su dinero en cuentas bancarias y utilizan sus tarjetas de crédito para pagar por bienes y servicios al hacer compras en línea. Los delincuentes están al tanto de esto y es por eso  que la mayoría de sus ataques en América Latina tienen como objetivo la información financiera.

Las amenazas que golpean a América Latina varían un poco de las que atacan al resto del mundo. Mientras que en Europa Occidental y en los Estado Unidos los principales programas de código malicioso utilizados para robar la información financiera son SpyEye, Zeus y ZeroAccess, en América Latina hay una actividad muy fuerte y muy activa por parte de los coders de Perú a través de SAPZ y vOlk.

Estos crimewares desarrollados localmente, y por ende en español, llegan a ser más y más populares entre los criminales regionales. De hecho, no son menos eficientes que los de la “competencia” desarrollado

en los países de Europa del Este. Generalmente el malware relacionado con el SAPZ y vOlk es detectado por Kaspersky como Trojan.Win32.VBKrypt en diferentes modificaciones.

“En este momento América Latina está experimentando una situación especial. Por un lado estamos observando el crecimiento del crimen cibernético local que es inspirado bajo las técnicas y el éxito de los criminales cibernéticos de Europa del Este, y por otro lado, en algunos casos, esos propios criminales ajenos a la región también están atacando a los usuarios con el fin de sustraer datos financieros”, explicó Bestuzhev. “La situación se agrava muchísimo con los malos hábitos de los usuarios hacia la piratería, la pornografía y la falta de conciencia para instalar los parches o realizar actualizaciones en el sistema”, añadió.

Según Bestuzhev, en el futuro previsible, la banca móvil se convertirá en el nuevo blanco de los ciberdelincuentes. Este cambio se deberá a la creciente popularidad de los servicios bancarios entre los propietarios de smartphones y tabletas, y por el hecho de que muchos dispositivos no tienen instalados programas de seguridad.

“Los dispositivos con plataforma Android serán probablemente los más atacados. Los países donde las tasas de penetración de Internet son altos, y los servicios de banca en línea son muy populares, atraen a los delincuentes que ponen sus tecnologías cada vez más sofisticadas a la prueba allí”, añadió.