Pompeo busca contrarrestar la influencia china y rusa en Europa Central

El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, llegó este martes a Praga para comenzar en República Checa una gira de cinco días por Europa Central, donde tratará de contrarrestar la influencia de Rusia y China en la región.

El avión del político republicano aterrizó en el aeropuerto Vaclav Havel de Praga el martes, según informó la televisión pública checa.

El jefe de la diplomacia estadounidense visitará hoy y mañana República Checa, el jueves se trasladará a Eslovenia, el viernes a Austria, y cerrará la gira en Polonia el sábado.

"Estados Unidos y la República Checa están trabajando juntos para abordar desafíos comunes, incluida la lucha contra la desinformación y garantizar que la tecnología y los flujos de inversión no aumenten los riesgos para la seguridad nacional", indica el Departamento de Estado en su nota sobre el viaje de Pompeo.

Este martes, Pompeo asistirá en la ciudad de Pilsen a una conmemoración por el 75 aniversario del final de la II Guerra Mundial, ya que esa región del país fue liberada por tropas estadounidenses de la ocupación nazi.

En esa ciudad, situada a 75 kilómetros al oeste de Praga, se reunirá con el titular de Exteriores checo, Tomas Petricek.

El miércoles, el jefe de la diplomacia estadounidenses mantendrá un encuentro tanto con el jefe de Estado checo, Milos Zeman, como con el primer ministro, Andrej Babis.

El embajador Philip Reeker, subsecretario adjunto del Departamento de Estado para Asuntos Europeos y Euroasiáticos, explicó en una rueda de prensa telefónica que tanto la influencia energética rusa como la tecnológica china serán un asunto clave en la gira centroeuropea.

En concreto, EEUU quiere ayudar a "encontrar fuentes alternativas" al gas y petróleo de Rusia, el principal suministrador de la región, para que Moscú "no tenga esa herramienta de control", según expuso Reeker.

En el caso de China, la expansión de la tecnología 5G con la participación de empresas chinas, como Huawei, es un aspecto de gran preocupación para Washington.

EEUU está preocupado por los riesgos que plantea "la infiltración china en las redes de alta tecnología, especialmente del 5G", subrayó Reeker.

En mayo pasado, Praga y Washington firmaron telemáticamente una declaración conjunta sobre seguridad en esa tecnología y calificaron de "vital" la protección de las redes de comunicaciones para garantizar la privacidad y las libertades de los ciudadanos.