La Comisión Federal de Comercio (FTC, en inglés) indicó en un comunicado que Meta (propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp) ha violado el acuerdo de privacidad que alcanzó en 2020 con esta agencia reguladora, que le obligó a pagar una multa civil de 5,000 millones de dólares.
Facebook (el antiguo nombre de la empresa) "engañó a los padres sobre su capacidad para controlar con quién se comunicaban sus hijos en la aplicación Messenger Kids, y tergiversó el acceso que daba a algunos desarrolladores de aplicaciones a los datos privados de los usuarios, denuncia la FTC.
Como consecuencia, la agencia propuso hoy prohibir que Meta obtenga ganancias derivadas de los datos de los menores, incluyendo después de superar los 18 años, así como nuevas limitaciones en el uso de tecnología de reconocimiento facial y protecciones adicionales para los usuarios.
Las medidas incluyen los productos de realidad virtual, que se enmarcan en el negocio del metaverso, por el que Meta apuesta con fuerza pese a que hasta ahora no es rentable, y que según reveló la empresa en febrero tiene previsto apoyarse en los usuarios adolescentes.
Se trata de la tercera ocasión en que la FTC toma medidas contra Meta en los últimos años, la más destacada en 2020, cuando además de imponer una multa exigió la aplicación de una serie de compromisos para proteger la privacidad de los usuarios, que ahora denuncia que no se están cumpliendo.
Meta reaccionó a la propuesta considerándola una "maniobra política" y dijo que la agencia no le dio la "oportunidad de discutir esta teoría nueva y sin precedentes" pese a llevar tres años trabajando en las medidas recogidas en el acuerdo, por lo que aseguró que "confrontará" las alegaciones.
"Seamos claros sobre lo que intenta la FTC: usurpar la autoridad del Congreso para establecer estándares en todo el sector y señalar a una compañía estadounidense mientras permite a compañías chinas como TikTok operar sin restricciones en tierra estadounidense", dijo en una nota el responsable de comunicaciones, Andy Stone.
Meta tiene 30 días para responder a la propuesta de la agencia, que forma parte de un proceso interno que comienza con una presentación de acusaciones de "riesgo público" y eventualmente puede terminar en un juzgado que decida sobre una orden, recurrible por la empresa, según The New York Times.