Gisela Leal vuelve a sorprender a sus lectores con una "Oda a la soledad"

En “Oda a la soledad y a todo aquello que pudimos ser y no fuimos porque así somos” de la joven escritora Gisela Leal, un suicidio fallido lleva a tres personajes a revalorar todo aquello que han sido sus vidas y lo que podría depararles un hipotético futuro en un mundo por demás inhóspito.

Gisela Leal publicó su ópera prima “El club de los abandonados” en 2012, con apenas 24 años de edad, y a la fecha ha publicado relatos cortos en la revista literaria española “Eñe”. Su segunda novela, “El maravilloso y trágico arte de morir de amor”, antecede al que  se puede hallar en las mesas de novedades en México.

En la trama, “María Helena del Pozo de Rivera” sabe muy bien lo que quiere y siempre lo ha conseguido. Suyos son el reino, el poder y la gloria: Podría nadar en dinero, pues está casada con un poderoso empresario; es hermosa y refinada, ejemplo de buen gusto y alma de todas las fiestas a las que asiste como invitada.

Además, para su absoluta dicha, tiene un primogénito en quien cifra absolutamente todas grandes esperanzas. “Renato”, tan rebosante de cualidades, reales e imaginarias, está, sin embargo, destinado no sólo a dirigir el emporio empresarial creado por su padre, y si no, con el tiempo, a convertirla en orgullosa abuela.

Nada es perfecto. “María Helena” tiene otro hijo, un declarado potencial suicida. ¿Por qué “Emiliano Rivera del Pozo” quiere suicidarse? Porque no hace mucho tiempo perdió todo interés en el hipotético futuro. Porque este es un mundo inhóspito, propicio para la soledad. Al menos eso es lo que él piensa.

Y porque le son indiferentes la opulencia, el poder y el brillo social. Piensa que para sus padres y en especial para su madre, nunca pudo ni podrá ser alguien más que el hijo invisible sobre quien sería un error tener expectativas. La vida, que siempre tiene otros planes, cambia los destinos de todos ellos en una sola y áspera noche.

“Sabía lo que quería y eso no iba a cambiar por una razón tan irrelevante y absurda como el amor”, piensa uno de los protagonistas de esta novela de Gisela Leal, quien de acuerdo con el escritor peruano Santiago Rocagliolo, “sabe de pop como Xavier Velasco, derrama veneno como Junot Díaz y mira a los ricos como Bret Easton Ellis”.

Fuente: Notimex