Abe, Bach, Mori, Coates, Koike, Miró: el 'quién es quién' del aplazamiento

El aplazamiento de los Juegos de Tokio al año 2021 y, en un segundo paso, la elección del 23 de julio como fecha de la ceremonia inaugural han recibido el aplauso unánime de la comunidad deportiva, un consenso fruto de largas negociaciones a las que todas las partes acudieron convencidas de que "no había otro remedio" que posponer los Juegos.

El primer ministro japonés, Shinzo Abe, y el presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), el alemán Thomas Bach, fueron quienes tomaron de forma conjunta la decisión del cambio de fecha, pero para llegar a ese acuerdo contaron con el asesoramiento de un amplio grupo de expertos que elaboraron el nuevo plan.

Este es el 'quién es quién' de las negociaciones para el aplazamiento de los Juegos:

SHINZO ABE

Primer ministro de Japón desde 2012 (ya lo había sido en 2006-2007), Abe ha conocido toda la trayectoria vital del proyecto olímpico de Tokio: desde su victoria en 2013, al ganar la sede de los Juegos a Madrid y Estambul, hasta este aplazamiento forzado por la crisis sanitaria del COVID-19. A medio camino, su inolvidable aparición en la ceremonia de clausura de Río 2016 disfrazado de Super Mario.

El pasado 24 de marzo, tras una conversación telefónica con Thomas Bach, compareció a las puertas de su residencia para confirmar lo que el mundo estaba esperando: "Japón, como país anfitrión, bajo las actuales circunstancias, ha propuesto que el COI estudie si se pueden aplazar cerca de un año los Juegos para que los atletas puedan tener las mejores condiciones. Thomas Bach me respondió que está de acuerdo en un ciento por ciento".

THOMAS BACH

El abogado alemán accedió a la presidencia del COI el 10 de septiembre de 2013, solo tres días después de la elección de Tokio como sede. Su mandato y la preparación de los Juegos han corrido de forma paralela y exitosa, con una organización alejada de los apuros que pasó Río 2016 y con un permanente flujo de ingresos para el COI procedentes de los grandes patrocinadores japoneses, chinos y surcoreanos, que se sumaron a los viejos socios estadounidenses.

De trato cálido, uno de sus más estrechos colaboradores define a Bach como "el más mediterráneo de los alemanes": le gusta improvisar y siempre encuentra la forma de adaptarse a las circunstancias. Precisamente lo que necesitaba Tokio 2020 en este caso.

En las teleconferencias mantenidas en las últimas semanas para negociar con las federaciones, el interlocutor de Bach "solo veía su cara", de modo que se creaba una sensación de cercanía y confianza. "Pero siempre estaba rodeado y muy bien asesorado", comentan algunos de los negociadores.

YOSHIRO MORI

Ex primer ministro japonés (2000-2001), fue nombrado presidente del Comité Organizador de los Juegos en 2014, cuando ya había cumplido los 76 años. "Será un último servicio a mi país", dijo entonces.

Presidente también de la federación japonesa de rugby, se le considera uno de los principales impulsores de que la decisión de aplazar los Juegos, que iba a estudiarse durante cuatro semanas, se tomase en menos de 48 horas. Y también de que las nuevas fechas se consensuasen en seis días.

"Hay muchos aspectos que no pueden avanzar si no se decide rápidamente el nuevo periodo de los Juegos", apremió en la reunión constituyente del grupo de trabajo creado para estudiar los detalles de aplazamiento.

JOHN COATES

El presidente del Comité Olímpico Australiano fue vicepresidente del Comité Organizador de los Juegos de Sídney 2000 y entró en el COI en 2001. En 2009 ya estaba en su Ejecutiva y en 2011 en una vicepresidencia. En una de las primeras decisiones de su mandato, Bach le nombró en 2013 presidente de la comisión de coordinación de Tokio 2020, el grupo que se encarga de marcar el paso a los organizadores y asegurarse de que cumplen con los plazos.

"Es un abogado en ejercicio y se nota. Lleva bien preparados los temas y es afable y amable. Y muy amigo de Bach", indicaron fuentes del COI.

La decisión del Comité Olímpico Australiano de no enviar deportistas a los Juegos de Tokio si se mantenían las fechas en 2020 precipitó la decisión a favor del aplazamiento.

YURIKO KOIKE

Gobernadora de Tokio desde 2016, ha defendido durante toda la crisis del coronavirus que Tokio se haría cargo de los Juegos en cualquier circunstancia. La posibilidad de una suspensión, que Bach admitió que había estado "por supuesto" sobre la mesa, siempre fue descartada por Koike.

"No creo que sea posible que se cancelen", afirmó la gobernadora de Tokio. "El Gobierno de Tokio ha venido preparando firmemente los Juegos", insistió.

Tras el aplazamiento, sintió "alivio" aunque también inquietud. "Los problemas se amontonan, pero es mejor que si los Juegos hubieran sido cancelados", dijo Koike. "Los costes serán distintos, también el uso de las sedes. (...) Quiero hacer los preparativos necesarios para que todos puedan empezar a moverse en la medida de lo posible".

La escalada en el número de afectados por el coronavirus en Tokio es ahora su primera preocupación.

PERE MIRÓ

Mano derecha de Thomas Bach, que en 2015 le ascendió a director general adjunto del COI, el dirigente español se ha encargado de preparar el terreno al presidente con reuniones individuales previas a los macroencuentros, siempre por teleconferencia, con los grupos de federaciones o comités olímpicos.

"En realidad, cuando se llegó a estas últimas reuniones la decisión estaba ya tomada", apuntan los participantes. "No quedaba más remedio que aplazar los Juegos".

El visto bueno de las federaciones de atletismo y natación, que tenían campeonatos del mundo coincidiendo con las nuevas fechas de los Juegos en 2021, "ya estaba acordado y fue anterior y fundamental", indicaron las fuentes.