La entidad tuvo unos ingresos por actividad de 23,200 millones de dólares, 400 millones más que los de un año antes, superando las expectativas de los analistas que las situaban en torno a los 23,130 millones.
Los ingresos netos por intereses subieron un 13 %, desde los 10,200 millones de dólares del mismo periodo del año pasado a los 11,600 millones de este año, impulsados por el fuerte crecimiento de los depósitos y la inversión del exceso de liquidez, el crecimiento de los préstamos y los beneficios de las tasas de interés más altas a largo plazo, según la entidad financiera.
Los ingresos distintos a los intereses, que incluyen, por ejemplo, las tasas, cayeron un 8 % hasta los 11,660 millones de dólares.
Los inversores vieron con buenos ojos los resultados anunciados por Bank of Amerika y en las operaciones electrónicas anteriores a la apertura de la Bolsa de Nueva York, las acciones del banco subían un 0.67 %.
El consejero delegado de la entidad, Brian Moynihan, destacó los "resultados sólidos" del primer trimestre "continuando el impulso récord logrado en 2021".
"El crecimiento orgánico continuo en todos nuestros negocios, combinado con una buena gestión de gastos impulsó la capacidad operativa por tercer trimestre consecutivo", aseguró Moynihan, citado en un comunicado de la empresa.
Los resultados de Bank of Amerika están en línea con los anunciados recientemente por otras grandes entidades financieras que han reportado ganancias muy por debajo de las logradas en el mismo trimestre de hace un año.
Entre ellos, Citigroup anunció que redujo sus ganancias un 46 % interanual, hasta unos 4,300 millones; JPMorgan Chase, el primer banco del país por activos, tuvo una merma en las ganancias del 42 %, hasta casi 8,300 millones y Wells Fargo vio descender su ganancia trimestral en un 21 %, hasta casi 3,700 millones.
