"La recuperación mundial depende enormemente del crecimiento económico europeo, y apreciamos los importantes esfuerzos de los países de la Unión Europea (UE) por estabilizar el mercado", dijo en rueda de prensa el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores Liu Weimin.
La fuente oficial agregó que China "cree que los países europeos serán capaces de superar sus dificultades", y añadió que la segunda economía mundial "esta dispuesta a trabajar junto a la comunidad internacional con su apoyo a los esfuerzos de Europa".
El pasado día 13, S&P rebajó en dos niveles la deuda de España, Italia, Portugal y Chipre, y en uno la calificación de la de Francia, Austria, Malta, Eslovaquia y Eslovenia.
Tres días después, la agencia de calificación, muy criticada por los gobiernos europeos por la anterior decisión, rebajaba la nota del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF), en el que Bruselas quiere, precisamente, que participen naciones emergentes como China.
China es uno de los países que intenta promover la existencia de agencias de calificación alternativas a las tres estadounidenses que dominan el mercado (Standard & Poor's, Moody's y Fitch), a través de la local Dagong, cuyos resultados han comenzado a publicarse en la prensa oficial en los últimos meses.