El dato responde al crecimiento de las exportaciones, que suponen casi la mitad de la economía surcoreana, aunque la cifra estuvo por debajo de los 7,240 millones de dólares de superávit registrados en junio.
Corea del Sur ha mantenido su balanza por cuenta corriente en positivo desde febrero de 2012, al tiempo que el superávit acumulado durante los primeros siete meses de 2013 sumó 36,550 millones de dólares.
El BOK revisó además al alza sus estimaciones para todo 2013, y ha pronosticado que, apoyado en el crecimiento de las exportaciones, el superávit acumulado sea de 53,000 billones de dólares en vez de los 33,000 millones previstos anteriormente.
Estos datos dan un respiro a Corea del Sur en un momento en el que los mercados de varias economías emergentes están padeciendo la fuga de capitales y una consecuente depreciación de sus divisas debido a las especulaciones sobre el inminente recorte del programa de estímulo en Estados Unidos.
"No hay signos de salidas transfronterizas de capitales motivadas por la modificación del programa de compra de bonos en Estados Unidos ya que los cimientos de la economía surcoreana se perciben como sólidos", dijo hoy el director de estadística del BOK, Jung Young-taek, a la agencia de noticias Yonhap.
Jung recordó además que los inversionistas extranjeros continuaron siendo compradores netos en agosto, y que en julio adquirieron bonos y valores surcoreanos por valor de 4,230 millones de dólares.
En julio, la balanza comercial surcoreana tuvo un superávit de 5,680 millones de dólares, por encima de los 5,020 millones de junio, gracias a que las exportaciones subieron un 3.8 por ciento interanual hasta los 48,390 millones de dólares y las importaciones aumentaron un 3.5 por ciento hasta los 42,710 millones.
La balanza de servicios registró superávit de 357 millones de dólares, por debajo de los 1,180 de junio.
La balanza financiera registró una salida neta de capitales de 7,330 millones de dólares, por encima de la salida neta de 4,900 millones del mes anterior.
La balanza por cuenta corriente, que refleja los pagos e ingresos por intercambios con el exterior de bienes, servicios, rentas y transferencias, está considerada uno de los indicadores comerciales más amplios de un país.