A las 09:05 hora local (14:05 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en marzo sumaban 0.17 dólares con respecto al cierre del día anterior.
El petróleo de referencia en EE.UU. lleva una buena racha que se alarga ya una semana y que los analistas atribuyen a los recortes de producción de la alianza OPEP+ y la esperanza de que la campaña de vacunación anticovid lleve a la recuperación.
Este miércoles los inversores estarán pendientes de la lectura sobe los inventarios de crudo que divulga la Administración de Información Energética de EE.UU., pero de momento han recibido con entusiasmo las cifras de un grupo privado del sector.
Según el Instituto Americano de Petróleo, las reservas de crudo cayeron en 3.5 millones de barriles la semana pasada, mientras que, por contra, las estimaciones de los analistas apuntaban a una acumulación de casi 1 millón.
"Los niveles de los inventarios son importantes porque son un marcador del precio, ya que los almacenes funcionan como un colchón temporal cuando falla la demanda para que el suministro ofrecido pueda quedarse fuera del mercado y los precios sigan saneados", explicó el analista Bjornar Tonhaugen, de Rystad Energy.
En el frente de la lucha contra la pandemia, el mercado ha encontrado razones para el optimismo en los planes de Alemania para rebajar sus restricciones el próximo mes y la aprobación de la vacuna de AstraZeneca en Corea del Sur, entre otras cosas.
La demanda energética no se ha recuperado a corto plazo pero los inversores sí cuentan con una fuerte recuperación a medio y largo, que está impulsando los precios y que, sumada a los recortes de los grandes productores, invita a la cautela.
"Cuando las noticias alcistas pierdan energía, de repente los operadores van a darse cuenta: 'guau, hemos escalado demasiado alto', y correrán a aplicar una corrección de precio", opinó Tonhaugen.