Expertos piden a agencias calificadoras que se autorregulen como las empresas

Las agencias de calificación de riesgos deberían autorregularse como han hecho las instituciones y empresas de todo el mundo, es decir, dar a conocer sus temidos análisis sobre instituciones, empresas y países de forma trimestral, o al menos con cierta periodicidad para evitar el pánico de los mercados.

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En opinión del responsable de Estudios Financieros de la Fundación de las Cajas de Ahorros (FUNCAS), Santiago Carbó, las agencias forman un "preocupante oligopolio", y sería importante que mejoraran su metodología y elevaran sus niveles de transparencia.

En opinión del responsable de Estudios Financieros de la Fundación de las Cajas de Ahorros (FUNCAS), Santiago Carbó, las agencias forman un "preocupante oligopolio", y sería importante que mejoraran su metodología y elevaran sus niveles de transparencia.

En la presentación del último número de la revista Perspectivas del Sistema Financiero, editada por FUNCAS, Carbó también quiso destacar la importancia de las agencias, que a su juicio han obligado a las empresas emisoras a "disciplinarse" y a emitir gran cantidad de información sobre sí mismas.

Sobre la calidad del trabajo de estas agencias, donde trabajan "magníficos profesionales", "no tengo nada que decir", dijo Carbó, quien añadió, sin embargo que sería bueno conocer "sus tiempos", es decir, porqué deciden emitir calificaciones en un momento y no en otro, entre otras cosas.

Según el profesor de la Universidad de Minnesota y de la Universidad Complutense José Antonio Trujillo, autor de uno de los artículos publicados en la revista, la influencia de las calificadoras resulta "desmedida" y se ha convertido en un foco de inestabilidad para el sistema.

Trujillo insistió en que todas las instituciones mundiales se han autorregulado, es decir, se sabe cuándo van a transmitir la información sobre su evolución, al contrario que las agencias de calificación, que emiten informes cuando lo consideran oportuno.

Preguntado por si sería conveniente la creación de una agencia europea de calificación de riesgos, Trujillo aseguró de forma contundente que "Dios nos libre", ya que en su opinión "no aportaría nada".

Según Trujillo, las agencias de "rating" han tenido "demasiado protagonismo" en los últimos tiempos, por lo que hay que llevarlas de nuevo "al lugar en que siempre debieron estar", aunque sin olvidar que "su papel es importante".

Para Trujillo, las agencias fueron parte del crecimiento brutal del crédito y sus informes tuvieron que ver con el deterioro de la calidad crediticia, ya que a su juicio, abrieron la puerta a todo el mundo en lugar de actuar de forma más prudente y protectora.

Por su parte, el exsecretario de Estado de Hacienda y actual director general de FUNCAS, Carlos Ocaña, consideró que si las agencias de calificación no existieran "habría que inventarlas", ya que la información que emiten "es fundamental" para el buen funcionamiento de los mercados financieros.

Sin olvidar que "ha habido fallos" y "cosas mejorables" en la actuación de las agencias, Ocaña insistió en que "llevan más de un siglo funcionando" y en líneas generales "lo han hecho bien".