"Hoy ofrecimos una comida para Carlos Salazar, quien termina su periodo como presidente del CCE. Él ayudó en las negociaciones del T-MEC; aceptó los incrementos al salario mínimo y de cuotas para las pensiones y otros acuerdos que logramos junto con el sector obrero y empresarial", expresó el presidente en un mensaje en Twitter.
Además, añadió que, aunque no todo "fue miel sobre hojuelas", fueron más los puntos de coincidencia que las diferencias.
Con eso estuvo de acuerdo Salazar, quien dijo a medios al salir de la comida, en la que se ofrecieron alimentos típicos del natal Tabasco del presidente -sureste-, que hablaron sobre lo que le conviene a México y las "cosas que se han logrado juntos" (empresarios y Gobierno).
"Hay que creérnosla los mexicanos, podemos crecer más, podemos vivir mejor, podemos tener mayor bienestar como país. Es todo lo que platicamos con el presidente, yo creo que en los próximos tres años vamos a tener una conducción donde vamos a ir más unidos para tratar de lograr lo que nos conviene a México", continuó Salazar.
El presidente del CCE detalló que durante la comida todos los empresarios hablaron "claramente" de los temas en los que no están de acuerdo con el Gobierno mexicano y también de los puntos de acuerdo, como la voluntad de que "haya certeza, que se movilice la inversión" y que se incrementen la inversión pública y el gasto social.
Sobre la polémica reforma eléctrica propuesta por López Obrador, Salazar dijo que, junto con el Gobierno, el sector empresarial tratará de "cortarle las aristas" y de buscar si hay una solución, aunque detalló que no se habló específicamente del tema durante la comida en la que estuvieron presentes representantes de 14 organizaciones.