El alza fue impulsada por el fuerte crecimiento en Estados Unidos, el principal punto de origen de estos flujos, así como al endurecimiento en la aplicación de las leyes de migración por parte de la administración del presidente Donald Trump.
De acuerdo con el reporte “Migración y Remesas” dado a conocer este lunes, los migrantes mexicanos, como otros que envían remesas, están trasladando a sus países sus ahorros “en anticipación de una corta estadía en Estados Unidos”.
Durante 2017 los inmigrantes mexicanos que viven en Estados Unidos hicieron envíos de remeses a su país por casi 11.6 mil millones de dólares, haciendo de este el principal punto de origen de las remesas recibidas el año pasado.
Otros países que generaron elevados montos de remesas con destino a México incluyeron a Canadá, España, Francia, Alemania e Italia.
Aunque México se colocó a la cabeza de los países de Latinoamérica en términos de valor de remesas, otros registraron mayores alzas porcentuales y contribuyeron a que los envíos hacia la región alcanzaran los 80 mil millones de dólares en 2017, y crecieran 8.7 por ciento.
El Banco Mundial calificó de robusto el crecimiento de 15 por ciento registrado en Colombia, seguida por Guatemala con 14.3 por ciento; Honduras con 12 por ciento, Nicaragua con 10 y El Salvador con 9.7 por ciento.
Anticipó que las remesas registrarán este año un crecimiento de 4.3 por ciento de manera global para alcanzar los 83 mil millones de dólares, apoyado por una mejoría del mercado laboral en Estados Unidos y los prospectos de un mayor crecimiento en España e Italia.