Al inaugurar, en representación del presidente Enrique Peña Nieto, los trabajos del 49 Foro Nacional de la Industria Química, el funcionario reiteró también que haber extendido de común acuerdo la negociación hasta el primer trimestre de 2018, es una muestra más que clara que las tres naciones están interesadas en encontrar soluciones en beneficio trilateral.
“Esta negociación no puede terminar de un lado, desbalanceada, inclinada. Es imposible que los países que tenemos un balance legislativo podamos tener el espacio para procesar soluciones que no sean del interés de los tres países”, subrayó.
Dijo que a partir de la quinta ronda de negociaciones lo importante será ubicar el tipo de dificultades que cada tema enfrenta y se agrupen en cinco grandes temas o “cinco canastas”.
La primera es poner temas que han sido los más polémicos y defendidos por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, como el déficit comercial, industrias manufacturera y automotriz, en los cuales, de manera sensata y con equilibrios, se puede avanzar en el fortalecimiento de reglas de origen.
La segunda “canasta” tiene que ver con temas que no hace mucho se habían negociado y que se abordaron en el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP), donde están propiedad intelectual, protección de recursos tecnológicos, entre otros, pero que se llevarán a la mesa desde cero, con lo que cual México está de acuerdo.
En cuanto a la tercera, Ildefonso Guajardo subrayó que se trata de los temas del siglo XXI, que hace 22 años no eran tan relevantes y que los trajeron la reforma energética en México, pero también la revolución propiciada por empresas gaseras y petroleras de Estados Unidos y Canadá, que hacen a América de Norte la más fuerte y poderosa del mundo y requiere una estrategia específica.
En este grupo, el funcionario ubicó también el capítulo de nuevas tecnologías de la información, con reglas del comercio del siglo actual y no de las del siglo pasado, pues dijo que en cinco o 10 años desaparecerán una multiplicidad de empleos y por ello es urgente pensar en alianzas para la capacitación y desarrollo de trabajadores que tendrán los nuevos empleos.
El titular de la Secretaría de Economía destacó en este bloque el tema del sector servicios dentro de la manufactura, que ha avanzado en dos décadas de manera importante y hay que adecuarlos.
En cuanto a la cuarta “canasta”, puntualizó que está constituida por una agenda progresiva planteada por México y Canadá para incluir temas de género, de cooperación, de competitividad, derechos laborales y ambientales.
Guajardo Villarreal ubicó dentro del quinto bloque asuntos propuestos por Estados Unidos y que tienen que ver con capítulos de compras gubernamentales y empresas de Estado y sus relaciones de inversión con empresas privadas.
En este punto, consideró hasta un poco desconcertante que el equipo estadounidense haya empujado estos asuntos, dado que hablan de subsidios, responsabilidades a las empresas privadas que pretendan hacer inversiones conjuntas con empresas públicas, entre otros.
“Lo que es increíble porque empresas estadounidenses han hecho inversiones con Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad. Espero que esta canasta al final se caiga por sí sola, porque afectaría con efecto bumerang a los intereses de Estados Unidos, fundamentalmente”, opinó.
Más adelante, el secretario de Economía reiteró que en su óptica no es relevante que la fecha de conclusión de la modernización del TLCAN se empate con elecciones presidenciales en México, pues “si somos un país serio no tenemos que tener miedo a que candidatos tengan el valor de definir cuál es la visión de la nación y cómo llevar la relación con Estados Unidos. Eso enriquecería un debate profundo sobre estos temas”.
El Foro Nacional de la Industria Química reúne a principales actores del ramo con la finalidad de brindar un panorama internacional en materia comercial, económica, energética, ambiental y política.
En su intervención, el secretario de Economía dijo que es fundamental y esencial para el sector químico y petroquímico el actual proceso de renegociación y modernización del TLCAN.
El sector está en todas las latitudes y en todas las expresiones de las capacidades productivas de un país, en las cadenas de valor de alimentos, de fertilizantes y de manufactura a través de todo lo que tiene que ver con las calidades en terminados y codificaciones a envases, precisó.