El presidente de la Confederación Nacional de Productores de Papa (Conpapa), Gerardo García Menaut, argumentó que la delegación estadounidense insistirá en el cumplimiento de sus peticiones, centradas en reducir el déficit comercial que arrastra.
En la víspera de que inicie el siguiente encuentro para la modernización del acuerdo trilateral, a realizarse en la Ciudad de México, dijo que su "visión es que no vamos a poder llegar a un acuerdo en la quinta ronda y nos iremos a la siguiente, en Canadá”.
Entrevistado durante las actividades del XVI Congreso Nacional de Papa, celebrado en Los Mochis, Sinaloa, dijo que la sexta ronda será definitiva para saber si Estados Unidos cambia su actitud y forma de negociar para llegar a un acuerdo del Tratado de Libre Comercio (TLC).
Resaltó que el gobierno mexicano y la iniciativa privada se mantendrán con el interés puesto en la mesa de negociación, ya que el objetivoes seguir con un comercio libre y justo y, sobre todo, actualizar el tratado que lleva más de 20 años en función.
Durante ese tiempo, indicó, las tres naciones han estado inmersas en un acuerdo de “ganar-ganar” porque “nos hemos fortalecido” a través de la comercialización de productos de los diferentes sectores productivos.
Y aunque México fue el más beneficiado, porque no tenía las mismas condiciones de infraestructura, productividad y mecanización que ahora, entre otras, aclaró que se cumplió con el pacto de poner “los terrenos” al mismo nivel en 10 años.
“(Los tres países) somos codependientes”, remarcó García Menaut, al exponer que México exporta frutas y hortalizas a Estados Unidos que, a su vez, vende granos a 29 estados de la Unión Norteamericana.
Es porque ello que los productores de los dos países vecinos están en desacuerdo de dar por terminada la relación comercial, como lo ha manifestado el presidente Donald Trump desde su llegada al gobierno.
Sin embargo, si Estados Unidos cumple con retirarse del TLCAN, esto traerá consecuencias porque se regresaría a las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) y, en consecuencia, subirían los aranceles hasta 3.9 por ciento para el sector agrícola de los tres países, estimó.
Precisó que este aumento no es un impuesto significativo al costo de los productos, toda vez que la cuota de comercialización es superior a 9.0 por ciento a nivel mundial.
El presidente de la Conpapa aseguró que el problema radica “en que no habrá libre comercio y éste no será tan ágil (…) porque entorpecerá el tráfico de la mercancía en la zona fronteriza”
“Esto perjudica al consumidor final, acorta la vida de los productos, en particular los perecederos, y aumentaría su precio y tiempo de traslado”, insistió el entrevistado, quien afirmó que la situación también traerá incertidumbre a aquellos socios que pretendan hacer inversiones a mediano y largo plazo.
De no llegar a un acuerdo entre los tres países en la quinta ronda, programada del 15 al 21 de noviembre próximo, aunque esta vez sin la presencia de los principales jefes de los equipos negociadores, los tiempos se alargarán más allá del primer trimestre de 2018 por los temas políticos y electorales, sostuvo.
Asimismo, se hará aún más complicada, porque se celebrarán las elecciones en México, donde será elegido el nuevo presidente, diputados y senadores en julio próximo, añadió.
En tanto, en la Cámara de Representantes y del Senado de Estados Unidos estarán en proceso de reelección para finales del próximo año.