Este compromiso de gobierno (CG-246) que es parte del Programa Nacional de Infraestructura, tuvo una inversión de 230 millones de pesos y generó cerca de mil empleos en favor de la región.
Ambos distribuidores viales benefician a más de 600,000 habitantes de la zona metropolitana, con un tránsito más ágil y seguro, tanto de personas como de bienes y mercancías, y con una reducción en los costos de operación para los más de 60,000 vehículos que transitan diario por estas vías, lo que contribuye a mejorar la economía y hacer más competitiva a la zona.
Estas obras son indispensables para la modernización del Periférico de Mérida, con una longitud de alrededor de 50 kilómetros, y que es resultado de la estrecha coordinación con el ,obierno estatal para impulsar el crecimiento y desarrollo de esa entidad.
El Distribuidor Vial Calle 39 está integrado por un Paso Superior Vehicular formado por dos estructuras paralelas de concreto reforzado con 204 metros de longitud y con un ancho de corona de 14 metros, que aloja 6 carriles de circulación, tres por sentido, así como acotamientos exteriores.
Mientras que, el Distribuidor Vial Tixkokob consiste en una estructura tipo Paso Inferior Vehicular de concreto reforzado que tiene una extensión de 184 metros, con dos carriles de circulación, uno por sentido.
Estas vías hacen más rápido el flujo vehicular local y de largo itinerario que transita por el periférico. Y se traduce en una reducción de los tiempos de tránsito, evita los congestionamientos viales y, en consecuencia, disminuye las emisiones de contaminantes.
Además, a la fecha en Yucatán se trabaja en obras de relevancia logística para el desarrollo comercial y turístico de la región, como es la ampliación de la Carretera Mérida-Chetumal y la ampliación del camino Peto-Valladolid.