Venecia herida

Un gondolero canta indolente mientras pasea a un grupo de turistas por un Gran Canal vacío. Venecia presenta un aire enrarecido a principios de febrero, el mes de su emblemático carnaval. No hay rastro de los grupos de turistas que siempre abarrotan sus calles. Las terrazas están prácticamente vacías y las colas han desaparecido de sus museos.