Finaliza exposición conmemorativa del 50 Aniversario del Museo de Historia Natural

Con motivo de su 50 aniversario el Museo de Historia Natural inauguró en octubre de 2014 la exposición Patrimonio y Biodiversidad, que finalizó la tarde del 3 de mayo de 2015, la cual recibió más de 175 mil visitantes durante los 6 meses que estuvo abierta al público.

La exposición representó la consolidación de más de un año de trabajo dedicado a reunir cerca de 200 piezas de 10 museos y 8 instituciones de cinco estados de la República, para que habitantes y turistas de la ciudad de México pudieran apreciar lo mejor de estos recintos en un solo lugar.

Además de celebrar el 50 aniversario del Museo de Historia Natural en el Bosque de Chapultepec, esta exposición destacó la importancia de los museos de historia natural en las sociedades antiguas y contemporáneas como un testimonio del acervo natural y cultural que tiene el país, así como su papel en la divulgación de la importancia y cuidado de la biodiversidad.

A lo largo de su trayectoria, el Museo de Historia Natural de la Ciudad de México ha sido un espacio de inspiración para formar nuevas generaciones de científicos o biólogos, gracias a ese primer acercamiento a la ciencia. Es una historia recurrente, de una vocación surgida en una visita al museo que además de las exposiciones permanentes y temporales ofrece al público diversas actividades como obras de teatro, charlas de divulgación científica, talleres, cursos y visitas guiadas, entre muchas otras actividades.

Durante los meses en que la exposición Patrimonio y Biodiversidad estuvo abierta al público, se realizaron varias actividades complementarias como la presentación del Catálogo de Piezas Emblemáticas del Museo de Historia Natural, publicación que reúne fotografías e información de las 50 piezas más representativas del museo a lo largo de su historia.

Asimismo, se realizaron 426 recorridos guiados, charlas y actividades educativas con reconocidos profesores e investigadores mexicanos que enriquecieron la muestra desde sus experiencias en el ámbito científico. Algunos de los científicos participantes fueron el Mtro. Luis Espinosa Arrabuena, Director del Museo de Geología de la UNAM, quien habló sobre la historia de la pieza del Diplodocus y el Dr. Antonio Lazcano, miembro del Colegio Nacional, quien presentó el Catálogo de las 50 piezas amblemáticas y recordó su primera visita al Museo de Historia Natural como determinante para su vocación científica.

Aunque esta muestra fue conmemorativa al 50 aniversario del Museo de Historia Natural de la Ciudad de México, los orígenes de esta institución se remontan a 1865 con la llegada de Maximiliano de Habsburgo, quien fundó en el Palacio Nacional un "Museo Público de Historia Natural, Arqueología e Historia” en el que se concentró todo lo referente al campo de las ciencias en el país.

Desde entonces, y después de diferentes transformaciones, nació el actual Museo de Historia Natural en 1964, una época de esplendor cultural para la Ciudad, espacio que brindó, a los habitantes de la capital y a sus visitantes, un acercamiento al conocimiento sobre la evolución humana, la clasificación de los seres vivos, el universo y la Tierra a través de una propuesta vanguardista para la época.

En esta muestra abierta al público por más de seis meses, se exhibieron diversas piezas que llamaron la atención de los visitantes por sus particularidades, tales como el esqueleto de una ballena gris procedente del Museo de la Ballena de Baja California Sur, una especie que puede llegar a medir hasta 15 metros de longitud; las vitrinas del siglo XIX con curiosidades como las pulgas vestidas y un cerdito con dos cabezas de la colección teratológica (animales con malformaciones), piezas que remiten al antiguo Museo Nacional de Historia Natural, hoy Museo del Chopo.

Asimismo, hubo lugar para la fauna mexicana extinta en la Edad de Hielo, como el esqueleto del Tigre dientes de sable, proveniente del Museo del Desierto en Saltillo, Coahuila; el caparazón de un armadillo gigante, pieza del Museo de Geología de la UNAM en la Ciudad de México y el Mural de la Megafauna, realizado por la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO), entre muchas otras.

El Museo de Historia Natural de la Ciudad de México destacó en esta muestra la importancia de la labor de estas instituciones y sus colecciones en el conocimiento, valoración y conservación de la biodiversidad natural y cultural del país, así como la celebración, con todos los habitantes de la capital, de los 50 de muchos años más por venir de divulgación científica y educación ambienta en este museo, el más antiguo del país.