Johnson y Varadkar se reúnen para abordar la crisis del "brexit"

El primer ministro británico, Boris Johnson, se reúne este jueves con su colega irlandés, Leo Varadkar, en Inglaterra, en un nuevo esfuerzo por superar la actual crisis del "brexit" antes de la decisiva cumbre europea del 17 de octubre.

Johnson y Varadkar celebrarán esta tarde una reunión privada en la ciudad de Liverpool, noroeste de Inglaterra, según pudo saber el diario "The Times", si bien fuentes oficiales no han querido dar detalles del lugar ni la hora del encuentro entre los dos políticos.

La residencia oficial del 10 de Downing Street indicó, no obstante, que este contacto permitirá a los dos líderes mantener unas "conversaciones detalladas" sobre cómo alcanzar un "brexit" negociado antes del 31 de octubre, la fecha oficial de la retirada del Reino Unido de la Unión Europea (UE).

En tanto, el ministro británico del "Brexit", Steve Barclay, se reunirá hoy en Bruselas con el negociador de la UE, Michael Barnier.

Las negociaciones entre Londres y Bruselas parecen estar al borde del colapso después de que el Gobierno británico admitiese esta semana que ve "esencialmente imposible" una retirada con pacto.

El pesimismo entre los políticos aumentó después de que Johnson mantuviese el martes una conversación telefónica con la canciller alemana, Angela Merkel, en la que al parecer ésta admitió como "altamente improbable" conseguir el consenso necesario.

La semana pasada, Londres entregó a Bruselas su nueva propuesta, basada en limitar ciertos aspectos de la salvaguarda que diseñó la UE -acordada con el Gobierno de May pero rechazada por el Parlamento- para evitar una frontera entre las dos Irlandas.

En virtud de esa cláusula -rechazada ahora por el Gobierno de Boris Johnson-, Irlanda del Norte permanecería en el mercado único y la unión aduanera comunitarios hasta que Londres y Bruselas lleguen a un acuerdo sobre su futura relación comercial.

Sin embargo, en el nuevo plan remitido a Bruselas, Johnson propone que Irlanda del Norte abandone la unión aduanera y que los papeleos sobre los aranceles se hagan de manera electrónica, algo que para la UE es inaceptable, según los medios.