"España tiene mucho que enseñar a Estados Unidos sobre energías renovables", dijo Gore durante su intervención en una conferencia sobre sostenibilidad económica, organizada por el Ministerio español de Industria y el Instituto de Comercio Exterior (ICEX).
El premio Nobel de la Paz 2007 y vicepresidente de Estados Unidos durante la Administración de Bill Clinton (1993-2001) animó a las empresas españolas a invertir y a cooperar con las estadounidenses en esos aspectos, dijeron asistentes a la conferencia.
En esa intervención, en la que Gore no quiso que la prensa estuviera presente, el ex candidato a la presidencia de Estados Unidos consideró que el mundo se enfrenta a tres crisis: una económica, otra por los efectos del cambio climático y una tercera, sobre seguridad.
Asimismo consideró que ello se debe, en parte, a la dependencia actual de las economías de las fuentes de energía exteriores, en especial del petróleo, y a la vulnerabilidad que ello supone.
Gore consideró que el mundo está "ante una situación imperiosa" de encontrar nuevas fuentes de energía, como serían las renovables.
En su opinión, la crisis económica y del cambio climático podrían solucionarse de forma conjunta, tal como prevé el plan de estímulo económico del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, que contempla dedicar una multimillonaria cifra a las inversiones en infraestructuras y energías renovables, entre otros.
Agregó que al invertir en energías renovables se inyecta dinero a la economía, lo que permitirá crear empleo de forma inmediata, producir energía y reducir los riesgos del cambio climático para el planeta, lo que supondrá "un futuro más sólido y productivo".
Se refirió, en ese sentido, al liderazgo de España en ese sector, pues recordó que el país europeo es líder en el desarrollo de la energía solar, al igual que de eólica junto a Estados Unidos y Alemania.
El ex vicepresidente de Estados Unidos alertó una vez más sobre la necesidad de combatir los efectos del cambio climático sobre el planeta de forma global, y subrayó que esos peligros no son algo exagerado, como desde algunos sectores se pretende.