Según un sondeo de Newspoll publicado hoy en el diario The Australian, los laboristas cuentan con el 53 % de los apoyos frente al 47 % de la coalición gobernante Liberal-Nacional, encabezada por el primer ministro, Scott Morrison.
Sin embargo, ese mismo sondeo apunta que los consultados prefieren que Morrison, quien logró una sorprendente y apabullante victoria en los comicios de 2019, siga siendo el líder político del país oceánico, con el 44 % de apoyos frente al 37 % de Albanese, quien afronta su primera campaña electoral.
A pesar del inicio oficial de la campaña, a raíz de que Morrison anunciara el domingo la fecha de los próximos comicios, ambos líderes ya se encontraban desde hace semanas lanzando promesas electorales, ante la cercanía de la fecha límite para la votación.
Durante las próximas seis semanas, los candidatos y el resto de políticos tocarán un amplio abanico de temas como el aumento del coste de vida, el impacto de la covid-19, el cambio climático, así como la seguridad del país oceánico frente a potenciales amenazadas como China y los efectos de la guerra en Ucrania para atraer a los 17 millones de australianos habilitados para votar.
Durante esta primera jornada, ambos aspirantes han pasado apuros ante los medios: mientras Morrison tuvo que reconocer su error al viajar fuera del país durante los graves incendios de 2019-2020, Albanese quedó en evidencia al desconocer la cifra actual de desempleo y los tipos de interés.
Los votantes elegirán el 21 de mayo a los ocupantes de los 151 escaños de la Cámara de Representantes, que nombra al primer ministro, y se renovará la mitad del Senado.