Una delegación de AI se reunió con Bukele, quien asumió el Ejecutivo el pasado 1 de junio, para exponerle sus "recomendaciones iniciales" en las áreas de seguridad, derechos de las mujeres, reparación de víctimas de la guerra civil (1980-1992) y migración.
"Nos hemos reunido con el presidente Nayib Bukele para presentar nuestras preocupaciones sobre la grave situación de derechos humanos en El Salvador. Esperamos que su gobierno aborde estos grandes desafíos con determinación", dijo Erika Guevara Rosas, directora para las Américas de AI.
Según Rosas, el nuevo Gobierno salvadoreño "tiene una gran oportunidad de marcar un nuevo rumbo para El Salvador, así como tiene la responsabilidad de asegurar que los derechos humanos estén en el centro de la toma de decisiones y el diseño e implementación de políticas públicas en el país".
Instó a Bukele a "promover la protección de los derechos humanos en la región" por los "enormes retos" que también enfrentan Guatemala, Honduras y Nicaragua.
Según AI, Bukele también se comprometió a crear un grupo con las instituciones gubernamentales para "discutir estrategias para mejorar la situación de derechos humanos".
Por otra parte, Bukele "prometió abrirse al escrutinio internacional y permitir el acceso de diferentes organismos, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos".
AI enfatizó durante la reunión que El Salvador es conocido por "las violaciones de los derechos humanos de las mujeres y las niñas a través de la prohibición total del aborto, y por la violencia generalizada en el país".
El comunicado de AI apunta que Bukele señaló que su Gobierno "no criminalizará a las mujeres" e implementará "una estrategia integral" para prevenir la violencia.
El Salvador es uno de los países más violentos del mundo por sus tasas de asesinatos de entre 103 y 50,3 por cada 100.000 habitantes entre 2015 y 2018, índices atribuidos a las pandillas.
AI considera a El Salvador una de las naciones más peligrosas del mundo para las mujeres por los índices de epidemia de feminicidios y los altos niveles de violencia sexual que enfrentan.
