El periódico The New York Times indicó que aunque varios gobiernos locales y estatales quieren salirse del programa, el gobierno estadunidense insiste en hacerle cambios al programa, como que los policías de localidades asuman el papel de agentes de inmigración.
El rotativo asegura que es demasiado inflexible no permitir que las localidades y estados no quieran ser parte del programa, ya que el gobierno insiste en la obligatoriedad de éste a nivel nacional para 2013.
Nueva York, Illinois y Massachusetts están entre los estados que han dicho que no quieren que las huellas dactilares de cada persona detenida sean comparadas con las bases de datos de inmigración.
Argumentan que el programa Comunidades Seguras detiene a muchas personas sin que sean criminales, que socava la seguridad pública ya que testigos de crímenes y víctimas temen tener relación con la policía.
El viernes el director de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE), John Morton, anunció una serie de cambios al programa tras las fuertes y constantes críticas.
Anunció la creación de un comité asesor que sugiera mejoras y guías para funcionarios de inmigración y abogados sobre el uso de la discreción “cuando procedan” para asegurarse que la atención se centre en delincuentes peligrosos en lugar de infractores de tráfico y delitos menores.
El New York Times dio la bienvenida a la noticia de que abogados de ICE tendrán mayor libertad de no proceder con la deportación en casos contra inmigrantes que no representan ninguna amenaza concebible.
El diario añadió que si Morton en realidad quiere la asesoría de expertos, ya tiene el testimonio de jefes de policía y alguaciles, líderes de comunidades de inmigrantes y un creciente número de políticos estatales que dicen que lo mejor que se puede hacer con Comunidades Seguras es terminarlo.