Así lo indicó el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, en rueda de prensa en la que reiteró que Washington "prepara nuevas sanciones" contra Bielorrusia por sus "ataques a la democracia" y el uso político de migrantes "en violación de las normas internacionales".
"Desde luego que daríamos la bienvenida a Moscú para que use su influencia, empleada de forma constructiva y productiva para poner fin a estas prácticas inhumanas", subrayó Price.
Añadió que estas nuevas sanciones de EEUU contra Minsk, sobre las que no ofreció detalles, se harán "en coordinación" con la UE y otros socios y aliados.
"Reiteramos de nuevo nuestra llamada (al gobierno bielorruso) para detener de manera inmediata su campaña de orquestación y coerción de migrantes irregulares para que transiten por las fronteras en Europa", señaló Price.
Precisamente este lunes, los ministros de Exteriores de la UE prepararon el terreno legal para poder imponer las primeras sanciones a un país por "instrumentalizar" a migrantes a fin de ejercer presión política, en este caso a Bielorrusia.
Según las autoridades europeas, el régimen de Alxandr Lukashenko lleva meses impulsando una "guerra híbrida" que se ha plasmado en la entrada a través de Lituania, Letonia y Polonia de miles de migrantes irregulares a la UE, la mayoría procedentes de Irak.
Como consecuencia, tanto Polonia como Letonia y Lituania han declarado el estado de emergencia en los últimos meses por el incremento de la llegada de inmigrantes irregulares desde Bielorrusia.
Lukashenko, por su parte, ha negado todas las críticas, pero ha alertado a Bruselas de una "catástrofe humanitaria" en la frontera con la UE debido a la concentración de inmigrantes antes de la llegada del invierno.