El diplomático, quien se encuentra en el país antillano para coordinar la ayuda de la OEA tras el terremoto del pasado día 12, indicó que "lo que más me impactó fue como murió la gente pobre de formas tan trágicas".
"Este terremoto es la cosa más horrible que he visto en mi vida", afirmó Insulza en declaraciones formuladas en Haití y que publicó este jueves el diario chileno El Mercurio.
Las autoridades haitianas informaron esta víspera que al menos 170 mil personas murieron y más de tres millones quedaron damnificadas a causa del terremoto grado 7.0 en la escala de Richter que derrumbó gran parte de Puerto Príncipe y afectó a otras ciudades del país.
"Haití está luchando y hay que ayudarlos a volver a la normalidad. Todavía hay muchas carencias y hay que distribuir mejor la ayuda", señaló el ex canciller y ex ministro del Interior chileno.
Añadió que la prioridad en estos momentos es coordinar la asistencia. "Acá hay miles de ONG’s tratando de trabajar y eso tenemos que coordinarlo" con la organización de Naciones Unidas y la Misión de Naciones Unidas de Estabilización de Haití.
"En la mayor parte de los casos lo que se entrega es dinero y tengo la impresión que recursos hay hoy día, pero el problema está en la distribución", insistió.
Insulza consideró "imposible" saber la cantidad de dinero que se necesita para reconstruir Haití y señaló que es necesario que "el gobierno haitiano tiene que determinar qué es lo que se reconstruye primero y así es imposible estimar los montos".