El rey de España y el presidente argentino mantuvieron una reunión con empresarios de los dos países organizada con motivo de la visita de Estado de Felipe VI y la reina Letizia y en una jornada con agenda eminentemente de carácter económico.
Inicialmente la reunión estaba prevista solo con el rey, pero Macri decidió sumarse a ella para escuchar junto al monarca las preocupaciones y demandas de una treintena de empresarios españoles y argentinos.
En la sede de la Cancillería argentina y con la participación de los ministros de Exteriores de los dos países, Felipe VI destacó las estrechas relaciones bilaterales y la necesidad de seguir desarrollando nuevas posibilidades de colaboración económica.
Por su parte, Macri justificó las reformas económicas que está aplicando porque considera que son necesarias para salir de la crisis en Argentina, pero recalcó que hay que lograrlo "sin atajos" y cumpliendo las reglas en un mundo tan volátil.
Contenido económico tuvo igualmente el siguiente acto del rey de España, ya sin Macri, consistente en un foro sobre innovación organizado por la Fundación Cotec (de la que es presidente de honor) con el título "Buenos Aires, Buenas Ideas".
A los emprendedores argentinos se dirigió Felipe VI en ese evento con el fin de ofrecerles que consideren a España, sus empresas e instituciones como un "aliado natural" para construir puentes ante la comunidad innovadora internacional.
Por encima de sectores y tecnologías, consideró que la mayor garantía de futuro compartido entre España y Argentina es el talento y la pasión de los emprendedores, que dijo que están llamados a desempeñar un papel relevante en el progreso del país suramericano y en las relaciones con la comunidad innovadora internacional.
Asimismo, subrayó que las empresas españolas son internacionalmente reconocidas por su calidad y compromiso en los proyectos relacionados con participaciones público-privadas en los sectores de energías renovables, y que muchas de ellas son líderes en materia de responsabilidad social corporativa.
Previamente, el rey de España había conversado con jóvenes emprendedores que le explicaron algunos de sus proyectos y escuchó la intervención del presidente de Telefónica, José María Álvarez Pallete, cuya sede en Buenos Aires acogió el encuentro.
En su discurso destacó el momento "apasionante" de cambio que se vive debido a las nuevas tecnologías y en el que advirtió de que las reglas no están escritas para afrontar el futuro inminente.
A su juicio, todas las empresas deben afrontar cambios tecnológicos si quieren sobrevivir, y los países deben fomentar la innovación para no quedarse atrás.
Felipe VI, junto a doña Letizia, mantuvo después un encuentro en la Sociedad Rural Argentina con casi 2,000 representantes de la colectividad española en Argentina, que asciende a un total de casi medio millón de personas.
En ese acto destacó la significativa aportación que todos los que emigraron a Argentina por diversos motivos realizaron al desarrollo de este país a la vez que contribuían al bienestar de quienes dejaron en España.
"Quiero hoy dejar constancia -subrayó- de lo mucho que os debemos tanto los españoles como los argentinos".
La reina Letizia también protagonizó junto a la primera dama argentina, Juliana Awada, una reunión con representantes de organizaciones iberoamericanas de afectados o familiares de pacientes de enfermedades raras y que le agradecieron su compromiso con las personas que sufren este tipo de patologías poco frecuentes.
Antes de abandonar Buenos Aires para trasladarse a Córdoba, donde mañana asistirán junto a Macri a la inauguración del VIII Congreso Internacional de la Lengua Española, la agenda de la visita de Estado incluye una recepción al presidente argentino y su esposa.
Además, Felipe VI recibe a una representación del Congreso Judío Iberoamericano, cuyos responsables le entregan el premio Shalom en agradecimiento a la concesión de la nacionalidad española a los descendientes de los judíos expulsados por los Reyes Católicos.