La reunión a cuatro bandas se celebraría aprovechando la asistencia a la cita de la OTAN como invitados de los mandatarios de estos países de la región Asia-Pacífico, y estaría centrada en hacer frente al auge de China en la región, informó este lunes el diario nipón Yomiuri.
El viceportavoz del Ejecutivo nipón, Yoshihiko Izozaki, admitió hoy en rueda de prensa que se han iniciado los preparativos para esta reunión, aunque señaló que "por el momento no hay nada decidido".
La oficina presidencial del presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, anunció por su parte que ha recibido la propuesta de Tokio y que se encuentra analizándola.
La reunión, en la que además de Kishida y Yoon participarían el primer ministro australiano, Anthony Albanese, y su homóloga neozelandesa, Jacinda Ardern, estaría centrada en promover la idea de un "Indopacífico libre y abierto", la expresión acuñada por Tokio y Washington para contrarrestar la creciente influencia de China en la región.
Los líderes de Japón y Australia ya reafirmaron su compromiso con esta estrategia en la cumbre del Quad celebrada a finales del pasado mayo en Tokio, junto a los mandatarios de los otros dos países que se integran en ese grupo, Estados Unidos y la India.
Kishida, quien con su viaje a Madrid se convertirá en el primer jefe de Gobierno de Japón en asistir a una cumbre de la OTAN, aspira a discutir con otros líderes en la reunión la situación de Ucrania y su preocupación por las actividades militares chinas en Asia-Pacífico, según dijo en rueda de prensa la semana pasada.
La cumbre de la OTAN, prevista para los días 29 y 30 en Madrid, contará con la presencia de unos 40 líderes internacionales y unos 5,000 asistentes.