Durante una conferencia de prensa este miércoles, António Guterres, recordó las terribles consecuencias de la guerra de Corea, en la que murieron más de 3 millones de personas.
Guterres se refirió a la reciente resolución aprobada por el Consejo de Seguridad, que sanciona duramente a Corea del Norte, para que renuncie a su programa de armas nucleares.
"La resolución envía un claro mensaje sobre las obligaciones de paz y seguridad de la República Popular Democrática de Corea", dijo.
Agregó que las medidas son una oportunidad para resolver la crisis a través del diálogo y el compromiso diplomático.
"La solución a esta crisis debe ser política. Las potenciales consecuencias de la acción militar son horripilantes para siquiera imaginarlas", aseguró el titular de la ONU.
Guterres pidió a la comunidad internacional a enviar un mensaje claro y coherente a Corea del Norte a través del cumplimiento de sus obligaciones internacionales, la reapertura de canales de comunicación y nuevos esfuerzos para reducir las tensiones.