La UE espera pronto nuevas sanciones a Rusia pero aún persisten las diferencias

“Tal vez al final del día, pero aún quedan algunas cuestiones por acordar. Espero que acabemos el día (con un acuerdo), o quizá mañana, pero no puedo decir que vaya a ser fácil porque hay opiniones diferentes entre los Estados miembros”, indicó Borrell a la prensa a su llegada a un Consejo de ministros comunitarios de Exteriores.

Borrell recordó que la Comisión Europea y él mismo propusieron la semana pasada a los Estados miembros el noveno paquete de medidas restrictivas a Rusia, que para que salga adelante debe recibir el acuerdo unánime de los Veintisiete.

Entre otras medidas, esta nueva serie propone incluir a cerca de 200 personas y entidades más en la lista negra de sancionados, así como cortar el acceso de Moscú a los drones con los que ataca infraestructura civil ucraniana.

Para el ministro español de Exteriores, José Manuel Albares, tras “demasiados meses de guerra” y cuando casi diez millones de personas “se encuentran sin calefacción, sin electricidad, en condiciones inaceptables” en Ucrania, “es el momento de que los europeos sigamos actuando y actuemos con decisión para paliar esta situación”.

Albares se refirió en concreto a los 18.000 millones de ayuda financiera de la UE a Ucrania que han acordado los Veintisiete, y confió en que lleguen cuanto antes.

“Desde luego, España hoy alzará su voz para que esto ocurra lo antes posible”, insistió.

El ministro finlandés, Pekka Haavisto, avisó que deben estar “preparados ante una guerra que va a continuar” y para “ayudar a Ucrania en este invierno tan difícil”.

“Parece que estamos un poco estancados en un mes frío. Esperemos que no nos congelemos cuando se trata de (aprobar) sanciones, asistencia macrofinanciera y el envío de armas a Ucrania”, apuntó por su parte el ministro lituano, Gabrielius Landsbergis.

El titular austríaco, Alexander Schallenberg, señaló que “el tiempo apremia” y confió en que la aprobación del noveno paquete de sanciones llegue antes de la cumbre de líderes de la UE que se celebra el jueves en Bruselas.

“Esperemos a ver qué hace Hungría. Tenemos que tener clara una cosa: estamos en un conflicto sistémico frente a Rusia, frente a China. Pero sobre todo, internamente, tenemos que ser creíbles y cuando no aplicamos dentro los principios que queremos exportar fuera, tenemos un verdadero problema”, comentó, en referencia a que la aprobación de sanciones tiene que ser por unanimidad y a los bloqueos que recientemente ha puesto Budapest a otras decisiones comunitarias.

SANCIONES A IRÁN

Los ministros de la UE sí esperan dar hoy su visto bueno a un acuerdo político para imponer dos nuevas tandas de sanciones a Irán, en relación con la vulneración de los derechos humanos por la represión de protestas pacíficas y con el apoyo militar a Rusia, más en concreto por haber proporcionado a Moscú drones kamikaze.

Borrell dijo que el viernes habló con el ministro iraní de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian, con quien no tuvo una “conversación fácil” al manifestar el rechazo de la UE a las condenas a muerte de manifestantes, de las que ya se han cumplido dos, y al abordar las nuevas medidas restrictivas que verán hoy la luz formalmente.

“Irán sigue diciendo que no han entregado drones a Rusia tras el inicio de la guerra (en Ucrania), y que no planean enviar misiles a Rusia. Veremos”, dijo Borrell.

“Los europeos hemos sido siempre el puente que ha mantenido con vida el acuerdo nuclear (con Irán) y no queremos cerrar por completo la puerta. Y esto lo decimos hoy muy claro. Pero, de facto, tenemos la impresión de que Irán ha cerrado la puerta a las negociaciones sobre el pacto nuclear”, afirmó por su parte el ministro austríaco, en referencia al pacto entre Teherán y varias potencias para que no acceda al arma atómica, en el que media la UE, pero que se encuentra en punto muerto.

“Dejamos claro que estamos del lado de la gente inocente en Irán”, apostilló la ministra alemana, Annalena Baerbock.

Los ministros europeos también se reúnen hoy con sus homólogos de la Asociación Oriental (Ucrania, Moldavia, Georgia, Armenia y Azerbaiyán), un grupo que Borrell reconoció que es “muy heterogéneo” al incluir a países candidatos a entrar en la Unión y a otros que no lo son.