En un comunicado conjunto tras la XV cumbre entre China y la UE, los presidentes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea, Herman Van Rompuy y José Manuel Durao Barroso, respectivamente, han asegurado que durante las reuniones han recordado a Pekín que "la opinión pública en Europa sigue de cerca la situación en China", al igual que en otros lugares del mundo y en la propia Europa.
En este sentido, han transmitido a Wen que el diálogo con China sobre los derechos humanos es una parte esencial de la relación entre ambas partes, y valoraron que se haya retomado después de más de un año sin celebrarse este tipo de discusiones.
"Desde nuestro punto de vista éste debería proporcionar más progresos sobre el terreno. Hay todavía margen para la mejora y tenemos que centrarnos en eso", indicaron.
Además, recalcaron ante Wen que la UE otorga una "gran importancia al respeto de los derechos fundamentales en China", al igual que en otras partes del mundo, y en este sentido reconocieron "los tremendos avances logrados" en ese país al sacar a "cientos de miles de personas de la pobreza".
No obstante, admitieron que "sigue habiendo preocupaciones", en particular con respecto a las "restricciones de la libertad de expresión y la situación en el Tíbet".
Previamente a la cumbre entre la UE y China organizaciones defensoras de los derechos humanos habían pedido a Van Rompuy y a Barroso que aborden la situación de la región autónoma del Tíbet.
Durante el encuentro, unos 160 tibetanos y simpatizantes se manifestaron en el barrio europeo de Bruselas, con el fin de atraer la atención de ciudadanos, funcionarios y los representantes del Consejo Europeo y de la Comisión Europea sobre la situación en el Tíbet.
Fuentes comunitarias reconocieron tras la cumbre que en cuanto a los derechos humanos "hay momentos en los que hay tensiones", pero concluyeron que contexto global de la relación es "positivo".
En el comunicado conjunto de la UE y China también consta que ambas partes enfatizaron en la importancia de la promoción y la protección de los derechos humanos y del estado de derecho.
Ambas partes quieren fortalecer el diálogo en esta materia y su cooperación al respecto con "igualdad y respeto mutuo".
En este contexto, anunciaron su intención de celebrar la próxima ronda del diálogo sobre derechos humanos en China y expresaron su disposición a trabajar juntos para lograr "constantes progresos sobre el terreno".
Por último, tanto la UE como China reiteraron su compromiso con los principios de la ONU sobre derechos humanos.