La UE y Libia, responsables por la desprotección de migrantes en el Mediterráneo

La Unión Europea y Libia son responsables de que los migrantes y refugiados que cruzan el Mediterráneo central estén desprotegidos, dijo hoy la alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, Michelle Bachelet, que pidió a los gobiernos que den marcha atrás en las decisiones que han provocado que disminuyan las operaciones de búsqueda y rescate en esa ruta migratoria.

Según Bachelet, la ausencia de protección para quienes se lanzan al mar con el deseo de llegar a Europa “no es una trágica anomalía, sino la consecuencia de decisiones y prácticas concretas de las autoridades libas, de los Estados miembros y de las instituciones de la Unión Europea, y de otros actores que han creado en conjunto un ambiente que pone en riesgo la dignidad y los derechos humanos de los migrantes”.

La Oficina de la alta comisionada publicó hoy un informe sobre la búsqueda y rescate de inmigrantes en el Mediterráneo central -ruta que vincula Libia con la costa de Italia- durante 2020, año en el que su interceptación y devolución forzada a Libia aumentó con respecto al año anterior.

En 2020, la Guardia Costera Libia interceptó 10,352 personas, según cifras oficiales, y los obligó a regresar a Libia, frente a 8,403 en 2019. Muchos de ellos sufrieron detenciones arbitrarías a su retorno.

En el informe se constata que en el periodo analizado la UE y los países miembros no sólo redujeron significativamente sus operaciones marítimas de búsqueda y rescate, sino que la labor de oenegés humanitarias que cumplían este cometido fue obstaculizada.

La tensa situación también llevó a que cada vez más embarcaciones comerciales eviten acudir en ayuda de cayucos naufragados ya que saben que afrontarán retrasos y hasta se les impedirá desembarcarlos en puerto seguro.

Se explica que la Unión Europea, a través de Frontex y de su Fuerza Naval para el Mediterráneo, ha empujado a la Guardia Costera Libia para que asuma más responsabilidades en el salvamento de los migrantes cuando se encuentran en aguas internacionales, pero la ONU afirma que esto debe condicionarse a que los rescatados no sean devueltos a Libia, que no se considera un país seguro.

Por ello, la alta comisionada pidió a la UE y a Libia que cambien sus políticas y prácticas en esta materia, ya que las actuales están llevando a que muchos migrantes pierdan la vida.

Solo en la ruta del Mediterráneo central, sólo este año han muerto 632 personas a pesar de que el número total de llegadas a Europa ha disminuido notablemente.