Entre las medidas puestas en práctica también este año están las tomas de temperatura antes del acceso a las sedes de los exámenes, el uso de mascarillas o la preparación de sedes alternativas para las pruebas, en caso de que la situación sanitaria obligue a cambiar las previstas inicialmente.
Según la prensa local, en algunas partes del país, como Pekín, se ha puesto como requisito que el personal examinador esté vacunado.
En el caso de la ciudad meridional de Cantón, que atraviesa desde hace días un pequeño rebrote y es la única declarada zona de alto riesgo de contagio del coronavirus SARS-CoV-2 del país, se solicitó a los estudiantes que no viajaran fuera de la urbe antes de los exámenes.
Así, uno de los requisitos para los aspirantes a universitarios entre los residentes en Cantón es el resultado negativo de una prueba de coronavirus de ácido nucleico.
También en Cantón, las autoridades locales han puesto a disposición de los estudiantes de zonas de riesgo medio y alto 10 autobuses y 800 taxis, para minimizar los riesgos de contagio durante los desplazamientos.
El diario estatal Global Times apuntó que a aquellos provenientes de zonas de bajo riesgo se les permitirá quitarse las mascarillas una vez que entren al edificio donde tendrán lugar los exámenes, que en algunas zonas del país se prolongarán hasta el jueves.
Es habitual que los padres acompañen a sus hijos a los centros de exámenes, y la prensa local aparece hoy repleta de fotografías de los progenitores animando a sus vástagos antes de la entrada a las pruebas.