Lukashenko dice que "no echará a patadas" a los diplomáticos occidentales

El presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, afirmó este viernes que "no echará a patadas" a los diplomáticos occidentales tras las nuevas sanciones anunciadas por el Consejo de la Unión Europea (UE) por la crisis migratoria en la frontera con Polonia.

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El presidente bielorruso, Alexandr Lukashenko, en una visita a la frontera con Polonia, el pasado 26 de noviembre. EFE/EPA/MAXIM GUCHEK / BelTA / HANDOUT

"Ha pasado un día y algunas embajadas están haciendo las maletas, diciendo que el presidente (Lukashenko) va a echarles mañana a patadas. Quiero tranquilizarles (...) no vamos a echar a patadas a nadie", dijo el líder bielorruso, citado por la agencia BELTA.

Las sanciones, que suponen la respuesta de Bruselas a la crisis que estalló el pasado 8 de noviembre con la concentración de varios miles de migrantes en la frontera entre Bielorrusia y Polonia, afectan a 17 personas y 11 entidades, entre ellas la aerolínea bielorrusa Belavia.

La compañía aérea ya anunció que por el momento las sanciones no afectarán a los vuelos programados para la temporada de invierno, aunque reconoció que debido a sanciones anteriores su flota se ha visto reducida a 15 aeronaves.

Lukashenko precisó que la expulsión de diplomáticos occidentales, en caso de producirse, será "civilizada".

"Los que hacen las maletas, que se tranquilicen y las deshagan. Si les declaramos personas no gratas, tendrán tiempo para recoger sus cosas y marcharse", aseveró.

Por otra parte, aseguró que su país nunca cederá a presiones de Occidente para ser "como Ucrania", porque tiene su propia visión del futuro.

"Nos exigen que Bielorrusia sea como Ucrania. Un país ´democrático, con perspectivas y desarrollado´. Y nosotros respondimos sin tapujos hace dos días, que nunca seremos como Ucrania", afirmó el mandatario bielorruso.

Según Lukashenko, Bielorrusia está en la vanguardia de una "guerra híbrida" que Occidente está librando contra Rusia.

"Nosotros con el presidente ruso lo vemos, lo valoramos y actuamos de la forma debida", dijo.

Los países occidentales "utilizan todos los métodos" para presionar a Minsk, y a través de ella, a Moscú, cree Lukashenko.

"Somos el primer eslabón en la (campaña de) presión sobre Rusia. ¿Acaso podemos cambiar de rumbo y traicionar a Rusia y al pueblo ruso? No, no podemos hacerlo", aseveró.

Con todo, aseguró que Bielorrusia no ha roto todos los canales de comunicación con Occidente.

"No se crean que estamos en guerra, no hay ningún contacto, no vemos nada y no nos dicen nada. Pero hay canales por los que hablamos", dijo Lukashenko.