En concreto, la ONG, que ha encargado un estudio a un grupo de expertos, sostiene que el embargo está teniendo consecuencias negativas en el "desarrollo humanitario y económico de país".
Unas consecuencias, que según la ONG están teniendo un "impacto desproporcionado" en las mujeres.
El estudio, titulado "Los costos humanos y el impacto de género de las sanciones en Corea del Norte", argumenta que los mecanismos de la ONU para eximir artículos relacionados con la ayuda humanitaria son insuficientes para prevenir estos impactos sobre la población.
La ONG subraya además, que "los retrasos y la falta de fondos podrían haber causado la muerte de miles de personas".
Según una de las siete personas que participaron en la elaboración del documento, Kee Park, que ha trabajado en Corea del Norte como médico, las sanciones han restringido el acceso a las medicinas y a los equipos médicos más básicos.
"Esto provoca que el tratamiento de enfermedades infecciosas, las dolencias crónicas y las heridas sea mucho más difícil", agregó Park.
Durante los últimos años, el Consejo de Seguridad ha impuesto varias rondas de sanciones a Corea del Norte, en respuesta a su programa nuclear y de misiles.
Pese al acercamiento protagonizado entre Washington y Pyonyang, EE.UU. sigue defendiendo que todas las sanciones deben mantenerse y aplicarse con total rigor hasta que el Gobierno norcoreano dé pasos concretos hacia la desnuclearización.
Mientras, China y Rusia apuestan por suavizar los castigos para apoyar las conversaciones.
Los servicios humanitarios de Naciones Unidas han advertido en varias ocasiones a las potencias internacionales de que la situación en Corea del Norte es "grave".
