Debido a la enorme destrucción en el enclave hacen falta más medios financieros, indicaron. Solamente el Programa Mundial de Alimentos (PMA) necesita 48 millones de dólares extra (unos 36 millones de euros) para asistir a la población en los próximos tres meses.
En los últimos días ya fue posible para el PMA ampliar sus ayudas. Hasta el 3 de agosto fueron repartidas en la Franja raciones de alimentos para 312,000 personas, informó la portavoz Elisabeth Byrs. Se trata de más de 50,000 personas más que hasta el 31 de julio.
Junto con la organización de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) se ha iniciado además una acción para el reparto de pan. El objetivo es llevar a diario 10,000 kilos de pan de Jerusalén a Gaza, ya que la falta de electricidad impide funcionar a las panaderías del enclave.
Muchos palestinos comenzaron entretanto a volver a sus hogares en medio de la tregua. "La gente está empezando a dejar los refugios de la ONU", dijo el portavoz local de UNRWA, Chris Gunness.
Por primera vez bajó levemente el número de refugiados, hasta los 267,970 en 90 alojamientos de la ONU, señaló el representante en Twitter.
La ofensiva ha dejado una enorme devastación. Miles de personas ya no tienen hogar. Equipos de rescate comenzaron hoy a retirar cadáveres y montañas de escombros. (DPA)