Ban Ki-moon hizo alusión al tema durante su última participación en la recepción anual con la asociación de corresponsales en Naciones Unidas, antes de culminar su mandato al frente del Organismo mundial, previsto para el 31 de diciembre de este año.
"Esos comentarios son de particular preocupación a la luz de la impunidad que prevalece por graves casos de violencia contra los periodistas en Filipinas", dijo Ban.
En 2009 se registró la masacre de Maguindanao en la que 58 personas fueron asesinadas, entre ellos 34 periodistas, cuyos casos aún están pendientes de ser aclarados ante la justicia.
El secretario general agradeció la labor de los corresponsales en Naciones Unidas y señaló que contribuye a asegurar la rendición de cuentas y mantener informado al público sobre las obligaciones de la Organización.
Ban declaró que continuará defendiendo, tanto en privado como en público, el derecho de los comunicadores a ejercer su labor con libertad.