Después de revisar la solicitud, la Oficina de Asuntos Legales de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) concluyó que la demanda contraviene el Artículo 3 de la Constitución de la institución.
En el marco de esta regulación, la organización tiene estrictamente prohibido intervenir o realizar actividades de carácter político, militar, religioso o racial, prohibición "tomada muy en serio por la Interpol", indicó en un comunicado.
Se evaluó que los cargos contra Zelaya, consistentes en abuso se autoridad, usurpación de funciones públicas, ofensas al sistema de gobierno y traición a la patria, son de naturaleza política y carecen de elementos del crimen ordinario.
La "ficha roja" de la Interpol es una petición para detener provisionalmente a una persona, con el objetivo de extraditarla hacia el país que lo haya solicitado.
Un avión donde viajaba el presidente depuesto el domingo, en un intento por volver a Honduras, fue impedido de aterrizar en el aeropuerto de Tegucigalpa, donde las autoridades hondureñas pudieron aprehenderlo directamente apoyados en una autorización de detención nacional, explicó Interpol.
Si los informes son exactos y las autoridades nacionales fallaron intencionalmente en la detención sobre su territorio, esto también daría testimonio a la existencia de otros motivos para la promoción de la cooperación de la policía internacional.