Reconoce Israel ataque a reactor nuclear sirio en 2007

La censura militar de Israel liberó hoy documentos reveladores de que este país fue el que destruyó el reactor que se contruía en Siria en 2007.

El ataque no permanecía secreto pues datos fundamentales ya habían sido revelados por reportes de prensa y en las memorias del expresidente estadunidense George W. Bush y el vicepresidente también estadunidense Dick Cheney se le mencionaba.

Ahora que ha pasado una década del ataque, se decidió abrir esta información.

Los servicios secretos de Israel (Mossad) tenían en marzo de 2007 la sospecha de que existía el reactor sirio en la provincia de Deir al-Zor, en una zona cercana al río Eufrates.

Primero se tuvo que obtener la constancia de que esa instalación correspondía a un reactor nuclear, lo que pudo conseguirse gracias al envío de agentes encubiertos.

Luego de contar con la certeza de la instalación nuclear, el entonces primer ministro israelí Ehud Olmert trató de convencer a la administración Bush de encargarse de la destrucción, pero al fracasar en julio de 2007, Israel tuvo que recurrir a sus propias fuerzas.

De acuerdo a la información que publica este miércoles The Jeruslem Post entre otros medios israelíes, el gabinete de seguridad israelí tomó la desición de destruir la instalación nuclera al contar con la certeza de que existía la central.

El rotativo señala que en su momento, un funcionario gubernametal indicó que el reactor conformaba una amenaza con la cual Israel no podía convivir.

En septiembre de 2007, ante una posible fuga de información ya que la estadunidense Fox news había solicitado información al Pentágono sobre el reactor sirio, se tomó la decisión de realizar el ataque.

El gabinete israelí estuvo de acuerdo salvo el minisro de Seguridad Pública Avi Dichter, quien se abstuvo en la votación.

El ataque fue realizado a la media noche del 5 de setiembre de 2007 mediante cuatro F-15 y cuatro F-16, que entrando a Siria por Turquia en la misión "Arizona" dejaron caer 17 toneladas de bombas y destruyeron el reactor nuclear sirio que era construido con asesoría norcoreana.

El entonces jefe del Mossad, Meir Dagan, aconsejó guardar silencio, pues si no se reconocia el ataque, Siria no tendría que responder y se evitaría inclusive una guerra regional.

Fuente: Notimex