Durante su intervención en la IX Conferencia Internacional de Seguridad de Moscú, Lavrov consideró que la reciente cumbre de la OTAN "confirmó una vez más su incapacidad de ir más allá de su propia realidad inventada".
"Los estrategas de la OTAN imaginaron una vez más acciones agresivas de Rusia", señaló el jefe de la diplomacia rusa.
"Aún así permanecemos abiertos a un diálogo honesto y profesional", recalcó, y sostuvo que Moscú ha puesto sobre la mesa propuestas "constructivas y concretas para reducir la amenaza militar en toda la línea en la que Rusia tiene contacto con la OTAN, pero no ha habido respuesta en los últimos dos años".
"La OTAN no quiere tener ningún diálogo en la esfera militar", señaló Lavrov.
Las propuestas de Rusia consisten en establecer distancias de separación entre los desplazamientos de los aviones y buques rusos y los de la Alianza, así como entre los ejercicios militares de ambas partes.
En la cumbre de la OTAN en Bruselas, los aliados afirmaron que las acciones "agresivas" de Rusia "constituyen una amenaza a la seguridad Euro-Atlántica".
Entre las amenazas que supone Rusia para la Alianza, también citaron, además de la guerra de Ucrania, su integración militar con Bielorrusia, las "continuas violaciones" del espacio aéreo de la organización, el despliegue de misiles en Kaliningrado, así como la "diversificación" de su arsenal nuclear.
Asimismo mencionaron la "intensificación" de sus acciones híbridas, tales como sus "intentos de interferir en las elecciones" de los miembros de la OTAN, sus campañas de desinformación y su postura de "mirar hacia otro lado" respecto a los "cibercriminales" que actúan en su territorio.
"Continuaremos respondiendo al entorno de seguridad deteriorado, mejorando nuestra postura de disuasión y defensa, incluso mediante una presencia avanzada en la parte oriental de la Alianza", dijeron los países de la Alianza Atlántica.
"No puede haber una vuelta a la normalidad" a las relaciones con Rusia hasta que "demuestre" que cumple con la legislación internacional, aseguraron en la conclusiones.
No obstante, los aliados mostraron su disponibilidad al "diálogo" con Moscú en el marco del Consejo OTAN-Rusia, que el Kremlin se niega a celebrar, según dijo el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg.