El lunes la policía detuvo a una niña, Spojmay, que portaba un chaleco explosivo en el distrito de Janneshin, en la provincia de Helmand. La pequeña dijo a la policía que su hermano, un comandante talibán en el sur de Afganistán la obligó a detonar su chaleco junto a un puesto de control de la policía.
"Se trata de propaganda que hace el gobierno de Kabul para difamar a los muyahidines (combatientes)", dijo el portavoz de los talibanes Qari Yusuf Ahmadi.
"Jamás usamos menores y menos niñas en ese tipo de atentados. Tenemos normas para los atentados. El agresor deber ser varón, adulto, sano y hacerlo por su propia voluntad", agregó.
La policía en Helmand dijo que estaba buscando al hermano de Spojmay. El presidente Hamid Karzai dijo que usar niños para atentados suicidas viola tanto el islam como la cultura afgana.
Los talibanes han sido acusados en el pasado de usar niños como terroristas suicidas.
