Una jueza ordena a los fiscales que entreguen los documentos pedidos por la defensa de Manning

La jueza que lleva el caso contra el soldado estadounidense Bradley Manning por filtrar miles de documentos clasificados a WikiLeaks ordenó hoy a los fiscales entregar informes gubernamentales solicitados por la defensa para evaluar los daños causados por esas filtraciones.

Etiquetas: 

00044233-original.jpeg

Reproducción de una ilustración hecha el pasado 15 de marzo en la que aparece el soldado Bradley Manning, acusado de filtrar miles de documentos a WikiLeaks, durante una audiencia de su juicio en una corte militar, en Fort Meade, Maryland (EE.UU.).

Durante una audiencia en Fort Meade (Maryland, EE.UU.), la jueza militar que lleva el caso, la coronel Denise Lind, falló a favor de la petición del abogado de Manning, David Coombs, quien había solicitado acceso a esos informes, según informó en un comunicado la red de apoyo al soldado.

Lind ordenó a los fiscales que pongan a disposición de la defensa informes de varias agencias gubernamentales para evaluar los daños causados por la divulgación de cables diplomáticos clasificados y sobre las guerras de Irak y Afganistán difundidos por WikiLeaks.

La defensa del soldado lleva meses exigiendo el acceso a esos informes, que considera fundamentales para probar que las filtraciones no causaron un daño importante a la seguridad de EE.UU., y denunciando las trabas de los fiscales.

Las próximas vistas preliminares del caso están programadas del 16 al 20 de julio.

El comienzo del juicio está previsto para el 21 de septiembre, pero la jueza ya adelantó en una audiencia a principios de mes que, debido a cuestiones de procedimiento, podría retrasarse hasta noviembre o enero.

Manning, de 24 años, está acusado de la mayor filtración de documentos clasificados en la historia de Estados Unidos y se enfrenta a cadena perpetua si es declarado culpable de ayudar al enemigo, el más grave de los 22 cargos en su contra.

Muchos de esos documentos, según la acusación, incluían archivos secretos sobre las operaciones militares de EE.UU. en Irak y Afganistán.

El soldado trabajó como analista de información en Irak desde octubre de 2009 hasta su detención en mayo de 2010, cuando un informante del Pentágono, el pirata informático Adrian Lamo, supuestamente lo delató.