Dos miembros de este movimiento usaron una grúa colocada junto al árbol para cortar solo la punta del mismo, una acción desarrollada a primera hora de la mañana con la que quisieron manifestar que "en Alemania solo vemos la punta de la catástrofe que hay por debajo", según un comunicado de Letzte Generation.
"Mientras toda Alemania se pasa la semana haciéndose con los mejores regalos en los grandes almacenes otros se preguntan de dónde conseguirán agua para beber después de que las sequías e inundaciones hayan destruido sus cosechas", afirman los activistas.
Agregan que "el colapso climático está ante las puertas de Alemania" y que el Gobierno "no muestra ningún indicio" para proteger a la ciudadanía.
Según los activistas, las dos mujeres que se subieron a la grúa cortaron dos metros de la parte superior del árbol, situado delante del monumento símbolo de Berlín.
Medios locales informaron de que aunque había agentes de policía en el lugar estos no advirtieron la intención de los activistas climáticos y consideraron que la grúa estaba siendo utilizada para labores de mantenimiento de la decoración navideña.
No obstante, Letzte Generation mostró fotografías tomadas durante su acción en las que se ve a las activistas interpeladas por agentes de policía y cómo uno de estos carga en un furgón policial la parte del árbol talada y a una de las mujeres dentro del vehículo.