La compañía tiene como actividad la compra y venta de todo tipo de metales, así como la fabricación de lingotes de aluminio y utiliza como materia prima, principalmente, la chatarra de aluminio de transmisiones automotrices.
En un comunicado, la Profepa expuso que en atención a una denuncia popular, personal de esa dependencia realizó una visita para verificar las obligaciones ambientales, en materia de prevención y control de la contaminación de la atmósfera.
En la inspección, se observó que cuenta con dos hornos de fundición de chatarra de aluminio, mismos que emplean como combustible aceite lubricante usado que es extraído de los motores automotrices desmantelados fuera de uso y que comercializan.
Dentro de las infracciones de la empresa, destacó, se incluyen el que no cuenta con Licencia Ambiental Única, no canaliza sus emisiones contaminantes a la atmósfera, no ha realizado la evaluación de éstas, a fin de determinar la cantidad y tipo de contaminante y tampoco se presentó la Cédula de Operación Anual ante la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
