El hallazgo de la zorra gris es relevante porque detrás de este mamífero existe una larga cadena de vida animal y vegetal para su supervivencia. Además suele habitar bosques templados, matorrales, pastizales y aunque no es un depredador tope, es uno de los principales controladores naturales de la población de roedores, aves, reptiles y mamíferos como tlacuaches y cacomixtles, de los cuales se alimenta.
El Programa de Manejo de Sierra de Guadalupe, publicado en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México en 2016, presenta 8 especies de anfibios, 21 especies de reptiles, 96 especies de aves y 29 especies de mamíferos.
En agosto de este año, también se tuvo el avistamiento del murciélago trompudo (Choeronycteris mexicana) del cual no se tenía registro, y ahora se corrobora la existencia de la zorra Gris, gracias a la suma de esfuerzos entre la DGSANPAVA y el equipo técnico académico de la Colección Nacional de Mamíferos del Instituto de Biología de la UNAM, liderado por Yolanda Hortelano.