Las islas piden a la COP26 que los Ejércitos rindan cuentas por sus emisiones

Un grupo de activistas medioambientales de diferentes islas del mundo, algunas aún colonias de países como Estados Unidos, denunciaron este jueves la creciente militarización en los mares y pidieron que los Ejércitos globales "dejen de estar exentos" de las regulaciones sobre emisiones de gases de efecto invernadero.

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Logo del Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), en una fotografía de archivo. EFE/Barbara Walton

En una rueda de prensa en la sede de la COP26, organizada por la asociación "It takes roots", Sheila Babauta, de la Alianza contra el Cambio Climático de Micronesia, dijo que "el medio ambiente está siendo colonizado" y explicó que en su tierra natal en las islas Marianas, en el océano Pacífico, los peces, delfines y ballenas, así como la población, sufren las consecuencias de aguas contaminadas por torpedos y explosivos lanzados por el Ejército estadounidense.

"Para luchar contra el cambio climático, debemos eliminar todas las exenciones de las regulaciones que se aplican a las Fuerzas Armadas, tenemos que acabar con las guerras y con los enfrentamientos por el petróleo y el gas", afirmó, para añadir que el Ejército de EE.UU. es "uno de los principales contaminadores del mundo".

En el mismo acto estaba presente la agricultora de Puerto Rico Marissa Reyes-Díaz, que denunció que, debido a su "condición de colonia de Estados Unidos" y a la reciente aprobación de una ley que cede a una junta externa el control de los presupuestos, el país "no puede tomar sus decisiones" entre otras cosas para hacer frente a los efectos del cambio climático.

Adrien Halixte, de la organización haitiana Survie, pidió por su parte "justicia climática" al denunciar que Haití es una de las islas del Caribe más afectadas por el calentamiento del planeta aunque apenas genera emisiones de carbono.

No se trata de que los países desarrollados "ayuden"- dijo-, sino que deben "reparar" el daño que han causado, sin poner como excusa que quieren más control sobre cómo se gastará el dinero.

"Cuando eres responsable de un accidente de coche, pagas al otro conductor sin preguntarle cómo invertirá el dinero", puso de ejemplo.

Sequías más largas y lluvias más fuertes, además de los huracanes, dificultan la agricultura en el único tercio del país con tierra cultivable, lo que sume a la población en la hambruna y obliga al Estado a endeudarse con las instituciones financieras internacionales para hacer frente los daños.

Halixte pidió a los líderes de la cumbre del clima de la ONU, que acaba el viernes en Glasgow (R.Unido), que "ofrezcan soluciones reales" en su acuerdo final en lugar de las promesas sin cumplir de los últimos años.