Las morenas alteran el equilibrio de arrecifes en el Caribe, según estudio

Las morenas, conocidas como "serpientes de mar", están alterando el delicado equilibrio de los arrecifes coralinos del Caribe más próximos a poblaciones humanas, debido a la sobrepesca del tiburón y otros peces, según un estudio de la Universidad Internacional de Florida (FIU) difundido este miércoles.

Los científicos del Instituto de Medioambiente la FIU encontraron que los arrecifes coralinos localizados más cerca de poblaciones humanas tienden a concentrar menor número de tiburones y otros depredadores, con una excepción: las morenas, un pez serpentiforme "misterioso y difícil de estudiar".

Se trata del estudio más extenso realizado sobre la población de morenas en el Caribe mediante la combinación de datos de video de la empresa Global FinPrint y un análisis de ADN ambiental.

El objetivo de Global FinPrint era el estudio del comportamiento de los tiburones en ese hábitat vulnerable, pero los datos e imágenes de video condujeron a los científicos a fijarse en las morenas, "a menudo muy agresivas tras el cebo", capaces de "atacar a rayas, peces de arrecife e incluso pequeños tiburones", señaló Demian Chapman, codirector de la empresa y profesor de la FIU.

Por lo general, indicaron los investigadores en un comunicado, las morenas acechan a sus presas (peces, pulpos, cangrejos y langostas) incluso en las grietas más pequeñas de los arrecifes de coral, "lanzando un ataque furtivo desde abajo".

Y aquí es donde los datos de Global FinPrint se volvieron útiles, ya que proporcionaron una visión nunca antes vista de cuán comunes son estos depredadores ocultos en ciertos arrecifes.

Para el estudio, se utilizaron cámaras submarinas con cebo y se inspeccionaron un total de 67 arrecifes en 12 países del Caribe.

En los arrecifes más alejados de los humanos, donde los tiburones y otros grandes peces depredadores todavía son comunes, las morenas eran menos frecuentes o permanecían ocultas en su mayor parte.

Sin embargo, en aquellos más cercanos a poblaciones, donde se pescan tiburones y otros grandes depredadores, "las morenas eran más comunes y no temían arrastrarse y comenzar a morder cualquier cosa en el camino tras de su comida".

En efecto, las imágenes de los videos divulgados muestran a las morenas atacar con violencia las cestas metálicas donde se encuentra el cebo colocado por el equipo de investigadores.

Además de los datos de video recabados, el estudio de la FIU también utilizó el análisis de ADN ambiental, o ADN electrónico, "para rastrear si las morenas estaban cerca, incluso si estaban escondidas y no aparecían en la cámara".

El resultado del estudio fue concluyente: en los arrecifes más cercanos a la gente, la presencia de morenas era mucho mayor que en los más alejados.

Aún así, los científicos todavía no pueden establecer una conexión definitiva de "causa y efecto" entre la disminución de tiburones y la abundancia de morenas.

Sin embargo, estos datos apuntan que, a la postre, "cuando se interrumpe el equilibrio del arrecife, las poblaciones crecientes de morenas podrían tener consecuencias desconocidas para todo el ecosistema".

"Sabemos que los tiburones se alimentan de las morenas y probablemente compiten con ellas por presas, pero ahora tenemos que preguntarnos qué importancia tienen estas interacciones para impulsar las poblaciones y el comportamiento de las morenas en los arrecifes de coral", dijo Gina Clementi, ecóloga marina y coautora del estudio.

Clementi se mostró entusiasmada ante tantas preguntas aún por responder y las investigaciones futuras sobre la "ecología de estos crípticos depredadores de arrecifes" de aspecto tan amenazador y mordedura peligrosa.